"Estamos inmersos en un concurso de acreedores y la temporada que viene jugaremos otra vez, por desgracia, en Segunda División B. Esta es la única realidad y lo que hay que hacer es trabajar y buscar la suerte, porque la suerte no suele llamar a tu casa. De nada vale lamentarse". Enrique Huguet afronta sus últimos días como presidente del Cádiz poniendo al mal tiempo buena cara. ¡Qué envidia!

Ayer desayunaba, almorzaba y cenaba atendiendo a los medios de comunicación de la ciudad, entre ellos Diario de Cádiz, y optaba por lanzar su enésimo mensaje de tranquilidad a un trémulo cadismo del que volverá a formar parte como mero aficionado desde el próximo 30 de junio: "Los administradores concursales están trabajando con la misión primordial de garantizar la continuidad del club. Ellos no piensan en una posible venta de las acciones. Están centrados en lograr la viabilidad del Cádiz; ese es su gran objetivo".

Enrique Huguet no dio muchas pistas sobre lo acontecido el pasado lunes en una reunión del consejo de administración que, teóricamente, debía esclarecer un poco el futuro. "Fue una reunión normal del primer lunes del mes. Lo que ocurre es que como anuncié mi marcha de la presidencia se vio bien que asistieran a ella uno de los accionistas, los tres administradores judiciales y el letrado que lleva el concurso del club. De los accionistas fue Antonio Muñoz y el letrado, Javier Tebas, no pudo ir al estar de viaje y fue representado por un colega. El punto del día no era otro que realizar una propuesta del presupuesto de la próxima temporada. Y eso se hizo. Los administradores miraron con lupa el presupuesto, lo analizaron y nos dieron unos criterios básicos de cara al control del mismo. El montante variará. Y se van a controlar los gastos y los cobros de todas las actividades", explicó el presidente desmintiendo que dicho presupuesto fuera rechazado por las manos en las que se encuentra a día de hoy el Cádiz.

¿No se habló nada de una posible venta de las acciones? "No voy a contar nada de las deliberaciones que se hicieron en esa reunión porque son secretas", respondió el gaditano. "Pero si me preguntan a mí por lo que pienso diré algo que creo lógico. El máximo accionista quiere vender y mi deseo es que lo haga. Es como si un amigo quiere vender un piso. ¿No le das la enhorabuena cuando por fin lo vende? Si quieres vender algo es bueno que te lo compren. Y la mejor solución para los problemas del Cádiz, aunque no la única, es el traspaso de poderes. Pero para eso debe haber alguien serio que quiera comprar. Y no todo el que se interesa es una persona seria", añadió con propiedad.

Roberto Suárez, director deportivo del club, tiene lógicas prisas por empezar a trabajar de cara a la próxima temporada. Si no se vende. "Esto es un procedimiento judicial y todos debemos ir hacia el mismo lado. En diciembre lo hizo bien con poco dinero y sabemos que lo seguirá haciendo muy bien", concluyó Enrique Huguet.