El margen de elección de Pellegrino en el Cádiz CF y el primer descarte que debe hacer

Mauricio Pellegrino afronta el viernes 9 de febrero, en el partido contra el Betis (24ª jornada de Liga), su tercera prueba como entrenador del Cádiz CF después de su aterrizaje de emergencia en sustitución de Sergio González. El objetivo del técnico es sacar a flote a un equipo del que se hizo cargo ubicado en zona de descenso, de la que no se mueve de momento a la espera de una reacción, ya en la segunda vuelta, que no debe demorarse en demasía.

No una misión sencilla aunque ni mucho menos imposible la que tiene por delante el técnico, que de momento suma dos empates a cero en sus dos primeros partidos, el primero en casa ante el Athletic de Bilbao y el segundo en el terreno del Villarreal.

El nuevo entrenador consigue guiar al equipo a echar el cerrojo de la portería en sus primeras semanas en el banquillo y el siguiente paso es dar con la tecla del gol, un problema mayúsculo que impide al Cádiz CF sumar puntos de tres en tres. Es el menos anotador del campeonato.

Pellegrino encara su tercer compromiso como cadista en una situación que hasta ahora no se había encontrado. Recupera a jugadores sancionados (Fali y Rubén Alcaraz) y ya tiene a su disposición a todos los futbolistas contratados en el mercado de invierno tras la incorporación de Samassékou.

De de los 26 jugadores que ahora hay en plantilla (uno menos que en la primera parte de la temporada 2023-24), en principio sólo hay dos bajas y 24 están aptos para competir. Roger Martí y Javi Hernández están lesionados. Los demás pelean por entrar en la convocatoria.

Por primera vez, el técnico deba hacer un descarte porque en el acta sólo está permitida la inscripción de un máximo de 23 futbolistas. Si no hay bajas en el último entrenamiento antes del duelo andaluz, un jugador se tendrá que quedar en la grada por decisión técnica. Podría ser uno de los cinco defensas centrales.