De pronto, dos directores deportivos. El Cádiz CF recurrirá la sentencia ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), pero mientras la instancia superior decide al respecto, Juan Carlos Cordero vuelve al club tras ser declarado nulo su despido por parte del magistrado del Juzgado de lo Social Número 3 de Cádiz. La resolución puede tardar en conocerse un tiempo aproximado de un año y medio. Mientras tanto, es un empleado más que percibirá el salario que firmó bajo la gestión deportiva de Quique Pina a tenor de una sentencia que, eso sí, no es firme.

Aunque no sea firme la primera resolución, el Cádiz CF debe tener en nómina a Cordero. La entidad cadista puede elegir entre dos opciones después de ser obligada a readmitir a Cordero:

Una: Que el empleado despedido se incorpore al club de manera inmediata para que continúe trabajando. En ese caso habría que ver qué función le encomienda. El puesto de Cordero es director deportivo pero desde su despido es Óscar Arias quien ejerce ese cargo.

Dos: No asignar una función específica al empleado readmitido. Es decir, que Cordero cobraría el sueldo que le corresponde aunque sin ir trabajar.

La readmisión de Cordero significa que, a la espera de la resolución del recurso elevado al TSJA, el club tendrá en nómina a dos directores deportivos: Juan Carlos Cordero y Óscar Arias, su sustituto.

Esa duplicidad de personal se traduce en un aumento del gasto por parte del Cádiz CF. El club tendrá que pagar cerca de 400.000 euros por temporada entre los dos directores deportivos, aunque la cifra podría ser aún mayor una vez que el juez da por válido el contrato de renovación que Cordero firmó bajo la gestión de Pina. Ese documento incluye que el anterior director deportivo, ahora readmitido, debe cobrar un cinco por ciento en concepto de traspasos.

En ese caso, le corresponderían más de medio millón de euros: 225.000 euros por el pase de Álvaro García al Rayo Vallecano y 275.000 por el traspaso de Manu Vallejo al Valencia, además de otras cantidades menores como la procedente de la venta de Lucas Bijker en el verano de 2018. Sumadas las comisiones más la ficha del contrato, el Cádiz tendría que pagar más 700.000 euros a Cordero sólo por esta temporada. Le quedarían dos más de contrato, y en caso de ascenso de Primera División, su ficha aumentaría de manera considerable