El Cádiz afronta el final de año de la mejor manera posible. A falta del partido del próximo sábado en el Ramón de Carranza contra el Numancia a partir de las 21:00 horas, encuentro con el que se cerrará la primera vuelta, el equipo amarillo marcha líder con una ventaja de siete puntos sobre el segundo clasificado, el Almería, y de 10 sobre el tercero, el Zaragoza. Impensable allá por agosto.

La victoria del pasado domingo en el Carlos Tartiere sobre el Oviedo (0-2), además de certificar el título honorífico de campeón de invierno, permitió regresar al buen camino tras la derrota cosechada en el Fernando Torres de Fuenlabrada (1-0) y el empate cedido en la capital gaditana contra el Elche (0-0). Un marcador con el que, de paso, se ponía fin a la mala racha del conjunto amarillo cada vez que visitaba a los asturianos en esta etapa en la categoría de plata.

Pero el éxito frente a los ovetenses, unido al de este martes en Villaviciosa ante el Lealtad (0-1), un Tercera que puso en el Principado muy complicado el pase a la segunda eliminatoria de la Copa del Rey, también supone encadenar por primera vez esta temporada tres choques sin encajar gol. Considerando la importancia que otorga Álvaro Cervera al entramado defensivo, a no conceder nada al rival y a dejar el marco a cero, el registro no es un asunto menor.

Curiosamente, pese a la extraordinaria marcha del Cádiz, hasta la fecha sólo se habían logrado hilvanar dos jornadas sin que Alberto Cifuentes tuviera que recoger el balón del fondo de su portería, la novena y la décima, saldadas con un 1-0 al Huesca en casa y un 0-2 a Zaragoza en La Romareda. La segunda salida seguida, a La Rosaleda con el Málaga, no frenó la aceleración pero el 1-2 dejó en sólo dos la secuencia de duelos sin recibir ningún tanto.

Ahora, aunque sea combinando dos competiciones distintas como lo son la Liga y la Copa del Rey, el 0-0 con el Elche, el 0-2 en Oviedo y el 0-1 contra el Lealtad elevan a tres los partidos sin encajar ni un gol, a la espera de lo que suceda este próximo fin de semana en Carranza con el Numancia.

La cifra, que desde luego no parece para tirar cohetes, representa en cualquier caso un paso más de lo conseguido la pasada temporada, cuando el equipo sólo fue capaz de hilvanar dos encuentros sin recibir gol en dos ocasiones. Primero lo hizo cuando tras vencer al Zaragoza en tierras aragonesas (0-1) en el torneo copero, en la 10ª jornada empató 0-0 con el Sporting en Carranza. Las tablas en Lugo (1-1) pusieron fin a la dinámica. Luego, en la jornada 21 al empate con el Granada le sucedió otro 0-0 en Almería. El 1-1 en la Tacita ante el Mallorca rompió la buena línea de imbatibilidad.

La actual racha sin encajar un tanto es la misma con la que se cerró la primera campaña con Cervera en Segunda, la 2016-17. Entonces, el Cádiz encadenó los tres partidos entre las jornadas 12 y 14, en Lugo (0-1), con el Huesca (1-0) y en la visita al líder Levante (0-0). La posterior goleada al Alcorcón (4-1), obviamente muy celebrada, puso fin al registro.

No obstante, en la 2017-18, la que acabó con Cifuentes recogiendo el Trofeo Zamora al guardameta menos goleado de Segunda, estableció dos marcas que en estos momentos deben servir como referencia, como un horizonte al que tratar de llegar.

El primero, el más inmediato, cuatro partidos seguidos con el marco propio a cero, lo fijó entre las jornadas 2 y 4, con un 0-0 casero ante el Alcorcón, un 0-1 en Lugo, un 1-0 al Almería en Copa del Rey y un 2-0 al Nástic. El desplazamiento a Oviedo (1-0) cortó aquella dinámica positiva.

Pero lo que de verdad marcó un antes y un después en esa campaña fue la gran racha establecida entre las jornadas 12 y 18, nada menos que siete encuentros seguidos sin recibir gol. Eso sí, por medio un inolvidable 3-5 al Betis en el Benito Villamarín en Copa. Todo empezó con un 0-0 con el Rayo en Carranza y prosiguió con un 0-2 en Almería, un 1-0 al Reus, un 0-3 en El Molinón sobre el Sporting de Gijón, un 1-0 al Valladolid, un 2-0 al Albacete y un 0-2 en Zaragoza. El 3-1 al Barcelona B no cerró la racha victoriosa pero sí la que se refiere a las dianas encajadas.

Esta temporada, brillante en la producción de puntos e igualmente destacada en la faceta realizadora, el Cádiz también se ha encontrado siempre entre los equipos menos goleados de LaLiga SmartBank y de hecho ahora mismo figura como el menos goleado, con 15. Sin duda, el buen funcionamiento del entramado defensivo en las últimas semanas, a pesar de que las bajas han afectado especialmente a la retaguardia, ha posibilitado el liderato en esa clasificación concreta y establecer el récord de encuentros sin recibir gol este curso, una marca que a buen seguro los amarillos tratarán de alargar como despedida de 2019, aunque el principal objetivo, como no puede ser de otro modo, sea sumar los tres puntos contra el Numancia.