La visita del próximo sábado a Las Gaunas para afrontar ante el Logroñés la segunda eliminatoria de la Copa del Rey se convertirá en la tercera oportunidad de la temporada en la que Álvaro Cervera podrá recurrir a las rotaciones para dar descanso a unos y la ocasión de reivindicarse a otros.

El desplazamiento a La Rioja convierte la semana en atípica por cuanto la plantilla se pondrá a punto con tiempo más que suficiente la cita del torneo del k.o. y sin embargo dispondrá después de sólo tres días para preparar el siguiente choque liguero, el miércoles 15 en el Ramón de Carranza contra el Mirandés.

Por ello, al técnico no le quedará más remedio que repartir esfuerzos entre sus hombres para minimizar el desgaste y sacar el máximo provecho del fondo de armario con el que cuenta esta campaña. También, por supuesto, con el reto por delante de superar la ronda, por más que la Copa no sea un objetivo prioritario ni mucho menos, y sobre todo para regresar en Liga a la senda del triunfo después del empate cosechado el pasado domingo en El Toralín ante la Ponferradina (0-0).

Como ya sucedió otras veces este curso cuando los partidos se acumularon en el calendario, el entrenador no tendrá dudas a buen seguro en dar un giro de 180 grados a su once inicial. Así ocurrió en los compromisos con Alcorcón y Lealtad. Eso sí, con muy diferente resultado.

En efecto, en la sexta jornada de la competición de la regularidad el conjunto amarillo rendía visita a Santo Domingo entre el fin de semana en el que había dado buena cuenta del Girona (2-0) en la Tacita de Plata y el que recibía al Deportivo de La Coruña (0-0).

La decisión de Cervera de dar descanso a los que más minutos habían acumulado no pudo salirle peor, porque los gaditanos, que habían encadenado cinco victorias consecutivas, sufrieron un dolorosa primera derrota en la localidad madrileña (3-0), ofreciendo además una pobre imagen, con nada menos que tres expulsiones y la sensación de destrozo de líneas que tan poco gusta al técnico. La experiencia de las rotaciones supuso un auténtico varapalo que de paso sirvió para consolidar a los que estaban disfrutando de la titularidad.

Entre los que aquel día tuvieron su oportunidad y no sacaron tajada de ello, quedaron especialmente señalados el francés Yann Bodiger, que vio la roja directa, y el central catalán Sergio Sánchez, defenestrado antes de ese partido y con posterioridad.

Más recientemente, el pasado diciembre, en el viaje a la localidad asturiana de Villaviciosa para afrontar la primera eliminatoria de Copa, ubicada entre el duelo del Carlos Tartiere de Oviedo (0-2) y el que ponía broche a la primera vuelta, en Carranza con el Numancia (2-4), el entrenador volvió a confiar en los menos habituales. Con un once poco reconocible, el Cádiz esta vez sí dio la talla y aseguró el pase gracias a un solitario tanto de David Querol (0-1).

Casi todo el equipo que saltó al campo estaba formado por futbolistas que no suelen contar o cuentan menos pero que rindieron a buen nivel, casos del propio Querol, el meta David Gil, el lateral derecho Carlos Akapo, el izquierdo Luismi Quezada, Bodiger y los canteranos Saturday y Duarte, sin olvidar a Sergio González y Alejo.

Menos de un mes después de aquello, las circunstancias mandan y el equipo amarillo presentará en Las Gaunas un once bien diferente al que suele alinear Cervera en Liga, también condicionado por los problemas físicos que dejan atrás algunos y las sanciones federativas de otros.

De este modo, el enfrentamiento con el Logroñés podría permitir a Rhyner regresar después de su lesión, lo mismo que pasa con Nano Mesa, pero también la lógica apunta a que podría ser de la partida, a pesar de su condición de titularísimos, Fali y Garrido, ya que la amarilla que vieron en Ponferrada les hará perderse la siguiente jornada por acumulación de tarjetas y en ese sentido no hay tanta necesidad de reservarlos. En la misma situación se halla Quezada, castigado por expulsión en la localidad leonesa, aunque en su caso no sea asiduo como titular.

Obviamente, la Copa debería brindar su opción igualmente a los David Gil, Akapo, Bodiger y Caye Quintana, al margen del recién incorporado Jorge Pombo y más de un canterano al margen de Sergio González y Javi Navarro, que han participado con más frecuencia en los encuentros ligueros.