Milutin Osmajic, futbolista del Cádiz CF, se vio envuelto en un altercado la noche del martes 12 al miércoles 13 de octubre en el Paseo Marítimo de la capital gaditana que deparó consecuencias inmediatas.

El club abrió un expediente disciplinario al delantero, al que además apartó del primer equipo y le obligó a entrenarse con el filial, con el que tiene ficha a sus 22 años (no posee licencia profesional al ser menor de 23). De hecho, fue titular en el partido que el conjunto de Alberto Cifuentes disputó contra el Panadería Pulido el domingo 17.

El caso se ha resuelto con celeridad en los tribunales. Osmajic fue denunciado y tras un juicio rápido ha sido condenado al pago de un multa de 300 euros más otros 150 en concepto de indemnización. En total, 450 euros le ha costado la trifulca de la que fue protagonista.

La escasa cuantía de la sanción judicial revela que se trató de un hecho leve. Una bronca sin más que, eso sí, ha supuesto un revés para el futbolista, que ha unos días después de los hechos defendió su inocencia a través de un mensaje que publicó en su cuenta de instagram.

El asunto queda zanjado por la vía judicial y ahora queda por saber cuánto tiempo dura el castigo impuesto por el Cádiz CF. Si nada cambia, Osjamic seguirá trabajando esta semana con el Cádiz B salvo que el club decida su regreso a las sesiones con Álvaro Cervera.

El atacante se ha visto enredado en un asunto desagradable del que trata de pasar página lo antes posible para centrarse al cien por cien en su profesión. De momento ha gozado de poco protagonismo en su primera temporada como jugador cadista.