La plantilla del Cádiz CF fue sometida esta semana a nuevos controles para comprobar si continúa libre de coronavirus. No fueron pruebas exhaustivas como las primeras antes de la esperada vuelta a los entrenamientos, sino test para seguir la evolución de los jugadores, técnicos y las personas que trabajan día a día en la Ciudad Deportiva de El Rosal desde la reanudación de las sesiones.

Todo va con normalidad, los resultados en principio no deparan noticias desfavorables y todos pueden continuar con su trabajo después del descanso del fin de semana. Está previsto que la próxima semana se lleven a cabo nuevas pruebas con las que se trata de atajar cualquier posibilidad de contagio masivo. Si alguien da positivo, iniciaría de inmediato un periodo de cuarentena que le obligaría a parar de entrenar.

LaLiga quiere que el campeonato se reinicie el próximo mes de junio y hasta entonces seguirá efectuando controles a técnicos y futbolistas. El objetivo es evitar la aparición del coronavirus, de ahí la frecuencia de las pruebas.

Mientras, el club está cumpliendo de manera escrupulosa las indicaciones recogidas en el protocolo de LaLiga preparatorio para la vuelta a la competición oficial. No tiene acceso a El Rosal ninguna personas sin autorización.

Y los que sí tienen permiso para hacerlo tienen que llegar en solitario en coche de manera escalonada con guantes y mascarillas puestos y deben tomarse la temperatura en la puerta. Además, técnicos y futbolistas tienen que arribar a las instalaciones ataviados con la ropa de entrenamiento.