El Cádiz CF regresó de vacío de Fuenlabrada tras perder un encuentro sobre el que reina la coincidencia general que estuvo condicionado por la expulsión de Jean Pierre Rhyner en el minuto 25 por doble amonestación.

Todo se complicó desde que el defensa vio la segunda cartulina amarilla en el ecuador del primer periodo. El Cádiz CF estuvo más de una hora sobre el césped con un jugador menos y al final se llevó la tercera derrota de la temporada.

Los varapalos siempre llegan fuera de casa: 3-0 en el campo del Alcorcón (en el sexto episodio), 1-0 en el terreno del Albacete (13ª jornada) y 1-0 en el estadio Fernando Torres que todavía está caliente.

El equipo amarillo no se baja del pico más elevado de la clasificación pese al último revés. Dispone de un amplio margen de error aunque los números, fiel reflejo de la realidad, desvelan el frenazo que el Cádiz CF sufre en su condición de viajero.

El conjunto entrenado por Álvaro Cervera se ve envuelto en una situación paradójica. Las cifras lo colocan como el mejor visitante de la categoría de plata, pero en las fechas más recientes se atasca cuando el calendario le obliga a comparecer en otro estadio que no es el Carranza.

Los gaditanos atesoran 17 puntos capturados en diversos feudos, con un recorrido de cinco triunfos y un par de igualadas. Ganan más puntos de los que pierde (se dejan 13 en el camino). Son los que más suman a domicilio, seguidos del Albacete (16), el Alcorcón (15) y el Almería (15).

El contraste lo pone el Deportivo de La Coruña, el colista del torneo y con sólo cinco puntos más allá de Riazor, todos con empates. El conjunto gallego y el Racing de Santander son los únicos que aún no han conjugado el verbo ganar cuando cumplen la función de foráneos.

La cuestión es que buena parte de los puntos fuera de casa los obtuvo el Cádiz CF en el tramo inicial del campeonato, cuando se embolsó 12 en los diez primeros capítulos gracias a cuatro victorias en cinco salidas en un arranque histórico.

La producción como visitante disminuye en la segunda parte de la primera vuelta. El Cádiz CF pasa de los 12 puntos de 15 en la parte inicial a los cinco de 15 en las citas más próximas en el tiempo. Del 80 por ciento al 33 por ciento.

La cosecha es aún más baja en las últimas cuatro salidas, en las que sólo se hizo con dos puntos de 12 (derrotas en Albacete y Fuenlabrada y empates en Vallecas y Tenerife).

Los números ponen sobre la mesa la ralentización del recorrido de los amarillos cuando ejercen de forasteros. La visita del líder supone una motivación extra para los anfitriones, como demostró el Fuenlabrada el pasado domingo.

El Cádiz CF es el enemigo a batir y cada vez es más complicado arañar puntos en territorio ajeno. Restan tres jornadas para la clausura de la primera vuelta, con dos compromisos en el hogar del Carranza (frente al Elche el domingo día 8 y el Numancia el sábado 21, ambos a las nueve de la noche) y uno en Carlos Tartiere contra el Real Oviedo (domingo 15 a partir de las cuatro de la tarde).