El alcalde de Cádiz, Bruno García, metió el pasado viernes en el debate del nuevo Hospital Regional, la variable de la financiación de una parte de la obra por parte de la administración central.

Por primera vez desde que el proyecto se reactivó, por lo menos de palabra, tras la victoria electoral del PP en Andalucía, hace seis años y utilizando el lema de 'Juanma lo haría', referido a este centro sanitario, se pone sobre la mesa la participación estatal en la obra. Nada que ver, como ejemplo, con el nuevo hospital de Granada, financiado por la Junta con un coste de más de 300 millones de euros, aunque también tras un largo proceso.

El viernes el alcalde recordó el fallido proyecto de 2004. En aquel momento fue el PSOE, gobernando la Junta, el que planteó por primera vez la construcción de un nuevo hospital para Cádiz. La Zona Franca jugaba en este proceso un papel esencial, encargada de la gestión del proyecto y poniendo, a la vez, el suelo necesario para sacar adelante la operación: los antiguos terrenos de Construcciones Aeronáuticas.

El largo trámite administrativo que se inició entonces, hasta que la propia Junta paró el proyecto y el PSOE se olvidó del mismo, incluyó la redacción de varios convenios y acuerdos de colaboración que firmaron todas las administraciones públicas. En ninguno de estos documentos se especificó una aportación económica del Estado.

Dos décadas después, José de Mier, entonces delegado del Estado en la Zona Franca y uno de los mayores defensores de este proyecto, recuerda que "en ningún momento se habló de dinero del Estado, pues estaba claro que era un proyecto protagonizado por la Junta de Andalucía".

"La Junta se encargaba de su financiación, como con los hospitales de Málaga y Granada. Sobre el papel no se puso nada de obtener financiación con la venta del solar del actual Puerta del Mar", propiedad de la Tesorería de la Seguridad Social, comenta a este diario De Mier.

El goloso suelo de la avenida Ana de Viya

El uso futuro del suelo en la avenida Ana de Viya era muy goloso. Una parcela enorme, una vez se hubiera derribado el actual centro sanitario, ubicada en una zona con un alto valor inmobiliario. "En algún momento se pudo hablar de esta posibilidad, pero casi no se tocó el asunto porque se asumía que la urbanización en el viejo Puerta del Mar era un proceso a muy largo plazo. Primero, había que construir el nuevo edificio, después derribar el actual y, por último, definir qué se podía construir en el terreno, algo que correspondía al Ayuntamiento". Un proceso que se podía contar por años, lo que a priori hacía inviable plantear una participación financiera de la Tesorería en la construcción del complejo sanitario en Puntales.

Lo cierto es que cuando se habló de esta urbanización se llegó a poner una cifra de viviendas factibles: 618, de las que 274 eran de renta libre y otras 344 de protección oficial. Esta propuesta, sin embargo, no se reflejó en ningún documento público.

Lo cierto es que desde que el PP recuperó este proyecto, con más o menos ganas, con más o menos intensidad, ninguno de sus representantes mencionó la necesidad de acudir a la financiación estatal para ayudar en la construcción.

Desde la llegada al poder en la región, en enero de 2019, los representantes del PP han apoyado el proyecto. En una primera fase, tanto desde la Delegación del Gobierno como desde la Consejería de Salud, se evitaban fechas y compromisos serios. En su momento, incluso, se llegó a afirmar que la consejería estaba inmersa en pasar la crisis de la pandemia antes de pensar en este proyecto... lo que no evitaba dar pasos en planes similares en otras capitales andaluzas.

Tras las últimas elecciones andaluzas sí se aceleró el proceso, e incluso se llegó a presentar un plan funcional para el nuevo hospital a la comunidad sanitaria del Puerta del Mar, aunque el contenido del documento nunca se hizo público.

Mientras, se entablaba una complicada negociación con la Zona Franca, como propietaria del suelo donde levantar el edificio.

Cesión gratuita del suelo

En un principio la Junta reclamó la cesión gratuita del suelo, acostumbrada como ha estado durante años en obtener terrenos y edificios de la ciudad sin coste alguno para sus arcas. Evidentemente, el Consorcio dejó claro que esta era una medida legalmente inviable, pues chocaba directamente con sus propios estatutos. A cambio, propuso un trueque: el suelo de Puntales por el suelo que la Zona Franca utilizaba en el Campo de Gibraltar y que es de propiedad autonómica. Todo, con la preceptiva valoración de cada uno de los terrenos y la compensación que fuera necesaria para la administración más afectada con la operación.

Sin embargo, este proceso tampoco ha salido adelante. La Zona Franca lleva ya unos años esperando una respuesta de la Junta, incluso de una alternativa que ésta anunció pero que nunca ha concretado. Por el momento, la dirección del Consorcio mantiene una postura de no entrar en ningún tipo de conflicto, por lo que calla y espera. Aunque esta espera afecta a sus propios resultados económicos pues este suelo sin uso le supone un alto coste de mantenimiento año tras año.

En todo este proceso que apenas avanza y que ha consumido ya unos años, ninguno de los altos cargos de la Junta que han conversado alguna vez sobre el mismo con este diario, desde consejeros a delegados provinciales y territoriales, ha mencionado nunca la participación del Estado en la financiación de este proyecto. Siempre el coste del mismo, que se asumía alto y que ha ido creciendo con el paso del tiempo (ya está por encima de los 400 millones de euros), salía de los presupuestos de la Junta de Andalucía o de fondos de la Unión Europea. En los últimos capítulos de esta historia se ha dejado claro que si no había dinero de la UE, la administración regional se encargaba de pagar todo.

Con todo, el año pasado desde la Junta se indicaba a este diario que la primera piedra del nuevo Hospital Regional se iba a poner antes de las próximas elecciones autonómicas, a celebrar en el último tramo de 2026. Si ahora entra en el debate la obligada participación económica del Estado, todo hace suponer que, salvo sorpresa, el proyecto puede sufrir una nueva dilación. Lo que sí está claro es que si el Hospital Regional de Cádiz acaba construyéndose, éste no estaba listo hasta entrada la próxima década... treinta años después de anunciada esta propuesta de la Junta para ayudar al desarrollo de la capital gaditana.

En estas dos décadas de espera para sacar adelante este equipamiento, la Junta ha incrementado la oferta sanitaria pública en la Bahía con la inclusión del Hospital de San Carlos, en San Fernando. Igualmente se han realizado numerosas inversiones en obras de mejora en el Puerta del Mar, con la reforma de distintos servicios y la puesta en funcionamiento de nuevos materiales médicos.