El problema no es de ahora, de que en una parcela de 5.152 metros cuadrados solo se vaya a edificar sobre una superficie de 1.696 metros cuadrados; ni de que se vaya a construir un edificio de 7.200 metros cuadrados cuando en su día (año 2011) se proyectó y presentó en el mismo sitio uno de 18.000 metros cuadrados. La clave de todo, según defiende el subdelegado del Gobierno, José Pacheco, está en el cambio de paradigma de la construcción, en haber deshechado ya las administraciones la “ostentación” anterior a la crisis para apostar ahora por edificios “funcionales, muy diáfanos” y por los espacios libres, las zonas verdes, y también el aparcamiento.

Ante las críticas que ha recibido el nuevo proyecto del Estado, que reduce la utilización del solar de Radio Juventud y de la antigua Subdelegación a un tercio, Pacheco defiende la operación y asegura que en el nuevo edificio proyectado “cabe todo y va a sobrar espacio”. “Vamos a tener un edificio que va a concentrar todos los servicios de la administración, un edificio sin aspavientos que da cabida a todas las necesidades que tenemos”, asegura el subdelegado, que defiende además que “no se puede rellenar una parcela entera de hormigón si no hace falta”.

El objetivo que se marca el Estado con esta operación es que todos los servicios de la administración central que ahora ocupen en Cádiz edificios y locales en alquiler se concentren en ese nuevo edificio que se va a levantar en el solar de Radio Juventud, en plena Avenida principal y a pocos metros de Hacienda. Con ello, se estima que la Administración estatal se ahorraría en torno al millón de euros anuales, que son los que paga actualmente en concepto de alquiler, con ejemplos tan rotundo como la propia sede de la Subdelegación (propiedad del Banco de España) por la que se alcanzan los 177.000 euros al año de alquiler.

Así pues, en el nuevo edificio proyectado con sótano y seis plantas en altura convivirán la Subdelegación del Gobierno y las dependencias integradas que actualmente tiene repartidas en varias sedes (Sanidad, hoy junto a la Casa del Mar en la Plaza de Sevilla; Agricultura, que está en la sede de Trabajo en Acacias; y los permisos laborales que gestiona Subdelegación, que están en ese mismo edificio de Bahía Blanca), la Demarcación de Costas (hoy en Marianista Cubillo), Telecomunicaciones (en Ana de Viya), Comunicación Exterior, el Sepe (en el Estadio) y la Abogacía del Estado (en el edificio de Hacienda).

Todos estos servicios y dependencias estatales sumarán más de 300 funcionarios que tendrán cabida en el nuevo edificio, donde también se han diseñado espacios para reuniones, para la celebración de actos, para la atención al público, para atender a los medios de comunicación, aulas de formación o archivos. Y todo ello en base a una Orden del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas de 2013 en la que se establecen “los índices de ocupación de referencia de los inmuebles de uso administrativo del Patrimonio del Estado”; es decir, que fija cuántos metros cuadrados tiene que tener cada trabajador en función a su rango y cargo.

Quedan fuera del nuevo edificio estatal que se ha proyectado en la Avenida el Instituto Social de la Marina, el Instituto Nacional de la Seguridad Social, Tesorería y la Dirección General de Tráfico. Administraciones todas ellas que ocupan actualmente sedes que son propiedad del Estado y que, por tanto, no conllevan esos gastos que sí tiene el alquiler.

También pone de relieve el subdelegado la decisión de habilitar un espacio de la parcela que no se va a edificar para aparcamiento, señalando a las graves dificultades que existen en la actualidad en la ciudad para encontrar un sitio libre. Un equipamiento que supondrá, por tanto, un alivio para los ciudadanos que encontrarán en ese solar junto a Hacienda una nueva bolsa de estacionamiento que colindará con la calle Acacias en prácticamente la mitad de la parcela, dejando la otra mitad anexa a la Avenida para un espacio libre que contará con zonas verdes y con mobiliario urbano (bancos, papeleras…).

Además, recuerda Pacheco que esta zona de aparcamientos y esparcimiento que suma 3.456 metros cuadrados de superficie contempla también que en un futuro se puedan levantar nuevas edificaciones si la administración estatal creciera o si se optara por alguna operación de venta de algunos de los actuales edificios en propiedad y, a cambio, se trasladaran allí esas sedes.

Una operación, por tanto, de la que José Pacheco se siente satisfecho porque, como él mismo recuerda, lleva desde 2018 tramitando e intentando hasta que ha conseguido que el proyecto se ponga en marcha con la adjudicación de los proyectos básico y de ejecución del nuevo edificio. Quince millones de euros son los que el Estado tiene previsto invertir en esta intervención, de los cuales 900.000 euros se han destinado ya a la contratación del estudio de arquitectura M Partida Architecture and Design para redactar en el plazo de tres meses el proyecto básico y en los cuatro meses siguientes el de ejecución.

De hecho, el subdelegado ha mostrado su sorpresa por las críticas recibidas por el alcalde de la ciudad, José María González, “porque el Ayuntamiento está colaborando en el proyecto desde el primer momento, para facilitar que se cumpla todo lo necesario a la hora de ejecutarlo” e incluso un técnico municipal ha formado parte del jurado que ha determinado qué empresa se hace cargo de la redacción de los proyectos básico y de ejecución. “El alcalde debería saber la superficie del edificio y los detalles del proyecto, porque Urbanismo está detrás de esto”, añade Pacheco, que indica además al regidor gaditano “que si su preocupación es habilitar allí un aparcamiento, que lo haga él en el Portillo, que tiene sitio de sobra”.