La Junta de Gobierno Local aprobó ayer la concesión de 23 licencias de venta ambulante en la playa para personas en situación de riesgo de exclusión social y para las que esta posibilidad de negocio supone un respiro para muchas familias durante los meses veraniegos. La edil de Asuntos Sociales, Ana Fernández, recordó que cada año se conceden 100 licencias de venta ambulante, de las cuales 23 se destinan a personas en situación vulnerable.

Para la concesión de estas licencias el Ayuntamiento seguirá el protocolo de años anteriores. Son las trabajadoras sociales de cada una de las unidades de trabajo social, los equipos de familia y del centro de acogida municipal los que, considerando las circunstancias socio-económicas de los usuarios, propondrán a las personas candidatas más idóneas, que accederán a la licencia de manera directa, siempre y cuando cumplan con las normas exigidas en estas bases.

El Grupo Gaditano de Mujeres de Mantilla organizará veladas benéficas en el parque

Para las plazas restantes (entre 6 y 16) o bien las que quedasen vacantes por renuncia o incumplimiento de normas por parte de los adjudicatarios, cada equipo de familia y el Centro de Acogida Municipal designarán un máximo de dos personas adicionales, para ser baremadas y poder optar a ellas. Señalarán a estas personas como suplentes en sus derivaciones. Será una comisión técnica quien informe de la concesión de las licencias.

Además, Fernández recordó que las bases para las otras 77 licencias de venta ambulante de playas se aprobaron el pasado mes de febrero.

Las solicitudes se pueden recoger desde el pasado lunes 30 de abril hasta el lunes 14 de mayo, en horario de 8,30 a 14,00 de lunes a viernes, en la Delegación de Consumo.

Por su parte, el concejal de Urbanismo, Martín Vila, destacó la aprobación de la licencia de obras solicitada por la Universidad de Cádiz para el Colegio Mayor Universitario Beato Diego José de Cádiz, que va a ser objeto de un proyecto de remodelación y ampliación. Vila resaltó esta "buena noticia" por lo que supone no sólo para la UCA sino también para la ciudad. "Estamos hablando de la recuperación de un equipamiento universitario que lleva años clausurado y que es muy necesario, dada la alta demanda de plazas de residencia universitaria existente. Y asimismo, este edificio vendrá a reforzar el frente universitario del Campus de Cádiz", apuntó.

El edil también informó de la modificación del convenio específico de colaboración entre el Ayuntamiento de Cádiz, la Universidad de Sevilla y la Organización Arquitectura Sin Fronteras-España, Demarcación de Andalucía, para la realización de actuaciones urbanas participativas en el barrio de Puntales. Recordó que ya el pasado mes de agosto se anunció que el Ayuntamiento estudiaba realizar un proceso participativo en Puntales para el planeamiento urbano de este barrio, y poco tiempo después se rubricó el convenio. Ahora se ha procedido a la modificación de una de las partes intervinientes en dicho acuerdo, pero ha señalado que esto no afecta al contenido del mismo, ya que su objeto y los compromisos adquiridos por las partes siguen siendo los mismos.

Por medio de este acuerdo, El Ayuntamiento, en el ámbito de las competencias de planificación urbana y enmarcadas en la EDUSI, está interesado en que la Universidad de Sevilla y la organización Arquitectura Sin Fronteras, realicen asistencia técnica para el diagnóstico y la definición de criterios para una propuesta de planificación física del área urbana del barrio de Puntales y su entorno, utilizando para ello estrategias y metodologías de diseño participativo.

Por último, se anunció también la aprobación de la solicitud realizada por la Asociación Grupo Gaditano Mujeres de Mantilla para la ocupación de espacio público dentro del parque Genovés, donde en su día estuvo ubicado el Cortijo de Los Rosales, para los días 7, 14, 21 y 28 de julio, y 4, 11, 18 y 28 de agosto, en horario de 21 a 24 horas. Y ello, con la intención de organizar diferentes veladas con carácter benéfico.