El Gran Teatro Falla de Cádiz se rehabilitará con 1,5 millones de euros el próximo préstamo municipal

Aunque el pleno extraordinario sobre el debate del estado de la ciudad no ha reportado muchas novedades sobre el futuro de Cádiz, el alcalde Bruno García sí ha deslizado en su intervención un llamativo anuncio en la sesión celebrada este viernes primero de agosto. El Gran Teatro Falla será objeto de una rehabilitación que estará financiada con parte de los 6 millones de euros que próximamente el Ayuntamiento que comanda pedirá a los bancos.

Así, si durante el pleno ordinario de julio, que tuvo lugar el jueves, el primer edil ya adelantaba su intención de contraer una nueva deuda que, como recalcó tanto ayer como este viernes, no provoca que se supere la cifra total que heredó a su llegada a la Alcadía, en este encuentro mensual no dio detalles sobre el destino de esta cantidad más allá de que se ramificarían en diferentes partidas que quedarían registradas en el capítulo de inversiones del presupuesto de 2026 para así garantizar su uso.

Una de ellas, como se ha conocido en el día que se despereza el mes estival por excelencia, será para poner a punto, que buena falta le hace, al principal coliseo de la ciudad que, además, es uno de sus emblemas de cara al exterior por su papel crucial en el seguido Concurso Oficial de Agrupaciones Carnavalescas que se celebra en su seno cada año. Esta reforma se acometerá como parte de las actuaciones que el Ayuntamiento emprenderá con motivo del Año Falla, ya que este 2026 se cumple el 150 aniversario del nacimiento, y 80 años de la muerte, del universal compositor gaditano Manuel de Falla y Matheu.

Así, tal y como ha podido saber este periódico, de los 6 millones de euros del nuevo préstamo, 1,5 se destinará a la rehabilitación, exclusivamente, de la fachada del Gran Teatro Falla que no se toca de manera seria desde la última intervención integral que se acometió en este equipamiento cultural entre 1986 y 1990 a cargo de los arquitectos José Antonio Carbajal Navarro y Rafael Otero González. Sí se han realizado otros trabajos parciales y puntuales en estos años, principalmente, para contener su evidente degradación o para adecuarlo a normativa.

También en los presupuestos de 2024 se incluyó una partida económica de 240.025 euros para acometer la reforma integral de la instalación de fontanería del Teatro, totalmente obsoleta, del que poco hemos podido saber en este tiempo. Un proyecto, que también contempló el equipo de Gobierno anterior y que tampoco realizó, que se ocuparía de sustituir las tuberías y la reforma de todos los aseos de acceso para el público, con la excepción del cuarto de aseo destinado a las personas con discapacidad y movilidad reducida -en la planta baja zona platea par-, ya que éste fue reformado en 2017, año en el que se abordó -eso sí se hizo- el Plan de Accesibilidad del Gran Teatro Falla por el que se realizaron varias obras para adaptar este equipamiento cultural a la normativa.

Así, además de adaptar el baño destinado a las personas con discapacidad y movilidad reducida, se señalizó el acceso adaptado en las puertas principales del lateral derecho y se instaló un bucle de inducción en la zona central del patio de butacas para mejorar la experiencia teatral a las personas con problemas de audición. Además, se acondicionaron las puertas de los seis palcos plateas reservados para las personas con movilidad reducida.

Otras mejoras fueron la instalación de la rampa hidráulica para la carga y descarga en la trasera del teatro y la sustitución del puente que une las dos alas de camerino por una plataforma elevadiza. Y también, en 2023, se pusieron los nuevos faroles exteriores y los vinilos de algunas de sus cristaleras que se erigían como la primera piedra del Plan de Mejora de Teatros de Cádiz al que se decía destinar, curiosamente, 1,5 millones de euros.

Desde el actual equipo de Gobierno ya advirtieron en 2024 su interés por invertir en el coliseo de la plaza Fragela con esa sustitucion de la fontanería, pero también con futuras partidas destinadas a la renovación de los asientos y a la restauración de la fachada neomudéjar del edificio a la que sólo hay que echar un vistazo para cargar de razones a los 1,5 millones de euros que se vertirán en sus lienzos. La apariencia exterior de un Teatro Falla que también padece de goteras que se sufren con especial incidencia en el área oculta por encima del paraíso (el espacio que queda por encima de las pinturas de Abarzuza) y, recordemos, carece de climatización.