La zona de las bóvedas que están enclavadas en la muralla de San Carlos va a ser objeto de una profunda remodelación con la que el Ayuntamiento pretende convertir ese rincón de la ciudad en un fuerte atractivo hostelero, comercial y cultural que dinamice toda la zona. Y un paso decidido en relación a este proyecto va a ser la urbanización de las calles Honduras y San Germán, donde precisamente se localizan esas bóvedas. La Junta de Gobierno Local dio ayer el visto bueno a la actuación que acometerá la empresa municipal Aguas de Cádiz y que supondrá una inversión que rondará el millón de euros.

Esta actuación dará un nuevo aspecto a ambas calles, habiéndose dividido en dos el proyecto de Aguas de Cádiz.

En primer lugar, se quiere actuar sobre la calle San Germán, que se va a convertir en una vía peatonal -salvo para el acceso a los aparcamientos que hay allí y para los servicios públicos-. La obra va a servir para corregir algunos problemas de evacuación de aguas y malas conexiones que hay entre las viviendas del entorno y el sistema general, según reconoció ayer la alcaldesa, Teófila Martínez.

Al convertir San Germán en una vía peatonal, el proyecto incluye la eliminación de las actuales aceras (de muy pequeña anchura, sobre todo en el lado donde hay viviendas y el colegio Celestino Mutis, prácticamente intransitable), siendo el presupuesto de esta obra de 393.366 euros.

Por su parte, la actuación en la calle Honduras tiene aún más relevancia, al tratarse de la circunvalación de la ciudad.

Esta obra permitirá mejorar la red de alcantarillado y también la conexión de las redes con las viviendas de la zona. Además, la alcaldesa anunció que se van a ensanchar las aceras, sobre todo la de las bóvedas, y se va a aprovechar la actuación para colocar allí también la rodadura de asfalto para mejorar las condiciones del tráfico, como precisamente se está haciendo ahora en el tramo de la Alameda entre Buenos Aires y el monumento al Marqués de Comillas. La actuación se completará con la mejora de la iluminación de toda la zona.

En este caso, el presupuesto se eleva hasta los 654.000 euros, lo que supera el millón de euros total de este proyecto.

Por tanto, reurbanizar ambas vías y darles un aspecto mucho más acogedor para el peatón será un paso fundamental para el proyecto ya en marcha de convertir las 34 bóvedas de San Carlos en un gran centro comercial, artesanal y hostelero. Para ello, conviene recordar que en primer lugar se adecentarán las bóvedas para después sacarlas a concurso en régimen de alquiler y para unos usos y bajo unas condiciones que se aclararán en su momento en el pliego que ya se está elaborando, según indicó ayer Teófila Martínez.

"Esta actuación va a significar un elemento dinamizador de la economía y de la vida social de la ciudad", resumió la alcaldesa, que confía que con estos trabajos se consiga el objetivo de seguir ampliando las rutas y recorridos que los turistas suelen frecuentar, aumentando así las posibilidades económicas de la ciudad.