Ocho años, que en política son dos legislaturas, han convertido el proyecto de construir una nueva comisaría de Policía Nacional en Cádiz de una “absoluta prioridad” a una opción del todo descartada. Ocho años en medio de los cuales hay un cambio de signo político al frente del Estado y una consecuencia demasiado repetida para la ciudad, que ve difuminarse otro equipamiento, otra actuación, la enésima inversión.

El equipo de gobierno que está al frente del Ayuntamiento de Cádiz ha salido con rotundidad al paso de la confirmación del Ministerio del Interior de que no contempla construir la nueva comisaría que se había emplazado en la Avenida de Astilleros. Una decisión que considera “una falta de respeto a la ciudad” porque la Comisaría es el último de los expedientes de la administración nacional que ha pasado “al fondo del cajón de las necesidades en materia de infraestructuras”.

“Ya no es sólo la Comisaría Provincial, que es un elemento dinamizador de la economía y de la zona donde se ubique, es que esta postura del Gobierno es sólo una más de toda la cadena de olvidos, abandonos y desagravios con Cádiz”, afirma la portavoz del equipo de gobierno, Lorena Garrón, que recuerda que esa lista “es larga, desde las murallas a la nueva Subdelegación y a la inacción respecto al Castillo de San Sebastián, entre otros asuntos”. “Son temas abiertos desde hace muchos años, y no es de recibo que aún ni se atisbe solución para ellos”, añade.

Por eso denuncia el Ayuntamiento de Cádiz que el Estado, que es la administración “que más capacidad económica tiene”, no esté invirtiendo en la ciudad. “Desde el Ayuntamiento de Cádiz no vamos a dejar de reclamar las inversiones que creemos justas y necesarias para la ciudad, que el Gobierno asuma su responsabilidad y que afronte las necesidades de una ciudad como Cádiz”. “Que duden más a la hora de la represión y las tanquetas contra los trabajadores, y duden menos a la hora de invertir en en la ciudad”, reclama para concluir Garrón.