Fallece el canónigo Marcelino Martín

A las cuatro de esta tarde, en la parroquia de Santa Cruz, el obispo diocesano Rafael Zornoza preside la misa "corpore insepulto" del canónigo de la Catedral Marcelino Martín Rodríguez, fallecido el pasado viernes a los 78 años de edad.El padre Marcelino, como era conocido en Cádiz, a donde llegó cuando tenía 23 años como secretario de su tío el obispo Tomás Gutiérrez Díez, que estuvo al frente de la diócesis desde 1943 a 1964, había nacido en Villanueva de la Peña (Palencia) el 29 de marzo de 1935, en una familia de ocho hermanos, entre ellos Rosa Martín Rodríguez, esposa del cofrade y exconcejal Francisco Carnota Acera.

Tras estudiar Teología en Roma fue ordenado sacerdote el 19 de marzo de 1958, año en el que llegó a Cádiz, siendo después nombrado párroco de Santa Cruz, templo del que estuvo al frente durante más de 35 años, y desempeñando el cargo de director espiritual de las hermandad que radican en la Catedral Vieja.

También fue profesor del Seminario Diocesano y de Religión en el Instituto Columela y actualmente era capellán del tanatorio Virgen del Rosario y patrono de la Residencia de Ancianos Matía Calvo.

Desde 1964 pertenecía al Cabildo Catedral en el que en la actualidad era también canónigo arcipreste y el más antiguo de la institución, motivo por el que el pasado año, en ausencia del obispo Zornoza, que asistía a Roma a la proclamación de San Juan de Ávila como Doctor de la Iglesia, presidió en la iglesia de Santo Domingo la función votiva en honor de la Virgen del Rosario, coincidiendo con su fiesta patronal.

El Obispado comunicó ayer su fallecimiento y, tras anunciar que el prelado presidirá hoy su funeral, envió su pésame a familiares y amigos.

También era capellán de la cofradía de Nazareno, que en 2011 le entregó su insignia de plata y cuya junta de gobierno ayer hizo pública una nota de prensa tras conocer su fallecimiento, en el que lo calificaban como "un sacerdote ejemplar y un fiel servidor de Jesús Nazareno", añadiendo que "se nos ha ido un amigo, un corazón repleto de bondad y humildad y una gaditano de Castilla enamorado de su ciudad y de su gente".

Precisamente su ausencia en la tarde del viernes en la iglesia de Santa María a la hora de presidir los cultos semanales a los titulares del Nazareno, algo inhabitual, provocó que desde la cofradía, al no atender tampoco al teléfono, se pusieran en contacto con sus familiares, que se desplazaron hasta su domicilio en la plaza de Candelaria, donde tampoco lo encontraron.

Por ese motivo pensaron que se podía haber trasladado a un pequeño campo que poseía en Chiclana, donde finalmente lo encontraron ya sin vida. Al lugar se desplazaron efectivos de la Guardia Civil, así como el Juzgado de Guardia, que ordenó el levantamiento del cadáver y su traslado al tanatorio Virgen del Rosario, donde a las cuatro y media de la tarde de ayer quedó instalada la capilla ardiente.

La noticia de su muerte se fue difundiendo en la ciudad a lo largo de la mañana de ayer, donde el padre Marcelino era muy apreciado y respetado, por su carácter humilde y servicial, además de un enamorado de Cádiz, lo que lo llevó incluso a ser durante unos años capellán del Cádiz C.F.

Igualmente el cabildo de gobierno de la hermandad de la Santa Caridad, a la que pertenecía desde 1972 y en la que desempeñó el oficio de capellán mayor durante muchos años, hizo público su pésame a sus familiares y amigos.

El padre Marcelino, además de un entusiasta filatélico, era un estudioso de la historia de la Iglesia diocesana y el pasado febrero publicó su cuarto libro, "El Cabildo de Cádiz en las Cortes de Cádiz", sobre los momentos más significativos de la presencia de la Iglesia gaditana y de su Cabildo Catedral durante los años 1812 a 1814, especialmente la persecución, prisión y destierro del vicario capitular y de tres miembros de su cabildo.

Asimismo publicó el titulado "La capilla del beato Conrado en Villanueva de la Peña", dedicada al religioso agustino Conrado Rodríguez Gutiérrez, sobrino también del obispo Tomás Gutiérrez y beatificado en 2005.

Igualmente es autor de "Santos y poetas. Pemán en la mirada del beato Conrado", en el que aborda la relación epistolar entre el escritor gaditano y el beato palentino.El pasado martes personalmente trajo al Diario un artículo sobre el Corpus, que publicamos en homenaje y recuerdo a su persona.

Hoy, tras el funeral, los restos del padre Marcelino serán trasladados a su pueblo natal, donde recibirán sepultura, junto con los de sus padres y su hermano Elías.Descanse en paz.