José Antonio Sierra ha dedicado medio siglo de su vida (supera ya los 80 años) a enseñar español en Francia, en Irlanda y en Reino Unido. Su currículo es largo y suma, entre otras iniciativas, la fundación, en 1971, del Instituto Cultural Español de Dublín (denominado Cervantes desde 1992), donde se impartían, además del español, las lenguas cooficiales, catalán, gallego y euskera.

Este profesor, que ha estado presente en el Congreso de la Lengua, verá a mediados de este año culminado un propósito en el que trabaja desde hace años: la creación de una Asociación Andaluza de Profesores de Español como Lengua Extranjera, que tendrá sede en Málaga, además de delegaciones en las demás provincias de la comunidad.

“Ya tenemos el apoyo de un buen número de profesores. Entre los principales objetivos se encuentra la difusión de nuestra lengua y el generar un nicho de empleo para expertos en ella, como pueden ser los filólogos, graduados en Traducción o los periodistas”, apunta Sierra, que estos días acude al Congreso Internacional de la Lengua.

No cree que la iniciativa vaya a chocar con la labor que desempeña el Instituto Cervantes, que difunde la imagen del español por el mundo. “Al contrario, se puede realizar una labor complementaria, mantener una buena línea de cooperación”, apunta, invitando a todo aquel profesional de la lengua a que se una a la nueva asociación. “Es esencial abrir una bolsa de empleo y, a partir de ahí, ofrecer nuestros servicios de una forma amplia, por ejemplo, a los establecimientos hoteleros, donde acuden miles de extranjeros a lo largo del año, muchos de ellos interesados en aprender español”.