Se hace el silencio en esta Cuaresma. Las marchas procesionales han dejado de interpretarse en Cádiz. La crisis del coronavirus ha provocado la cancelación de la actividad de las cuatro bandas que cada noche ensayan en la ciudad. Una decisión que se ha tomado de manera provisional estos días a la espera de conocer el desarrollo de la pandemia de cara a la semana próxima.

Así lo ha decidido la banda de cornetas y tambores del Rosario, que se ha dado jueves y viernes de descanso a la espera de tomar una decisión más firme de cara a la reincorporación al trabajo la próxima semana. La incertidumbre sobre el impacto del virus y las recomendaciones sobre la concentración de personas han provocado esta decisión de los músicos de Rosario, que el jueves conocían que este año no participarán en el concierto de la Tertulia Al Palo por haber cerrado el Ayuntamiento el Teatro Falla este mes de marzo y que también conocían ya que la procesión de Afligidos el Jueves Santo (a cuyo paso de misterio acompañan) ha sido suspendida.

La agrupación musical Polillas también adoptaba el jueves la misma decisión de cancelar los ensayos a la espera de tener noticias más certeras sobre la evolución del coronavirus y los procedimientos más seguros de actuación.

Peor suerte, incluso, ha corrido la agrupación musical de la Salud, que este viernes 13 de marzo tenía previsto hacer su puesta de largo oficial con un concierto en Salesianos donde también presentaría el nuevo uniforme y que ha quedado aplazado a consecuencia de la pandemia. 

Por su parte, la agrupación musical Ecce Mater anunciaba también el jueves la cancelación de todos los conciertos que tenía previsto celebrar esta Cuaresma que se ha quedado, por ahora, sin música procesional.