Nueva Carrera Oficial para la Semana Santa de San Fernando: un montaje que equivale al de ocho escenarios para grandes conciertos

La estructura adquirida recientemente por el Ayuntamiento se presenta como una de las grandes novedades de esta señalada fecha

Ocupa unos 2.260 metros cuadrados en función de las tarimas instaladas y supone una estructura "a la vanguardia" en los sistemas de montaje para eventos

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Montaje de la Carrera Oficial en la plaza del Rey de San Fernando / Julio González

El montaje de la nueva Carrera Oficial de la Semana Santa de San Fernando, que el Ayuntamiento isleño ha adquirido este año, equivale -en función de las estructuras empleadas- al de ocho grandes conciertos en un único evento. El dato -que apunta el fabricante, la empresa Lahyer Ibérica SL- da buena cuenta de la magnitud que ha adquirido la tribuna que se instala a lo largo de todo el recorrido oficial que realizan las 22 hermandades de penitencia y que da cabida a más de 3.000 localidades.

Por cierto, hay otra cuestión que merece tenerse en consideración: el Consejo de Hermandades cuenta con una larga lista de espera de personas interesadas en acceder a uno de los palcos, que no ha dejado de crecer en los últimos años.

La nueva Carrera Oficial, si se tiene en cuenta el dato de las tarimas instaladas entre la plaza del Rey y la calle Real, abarca una superficie de unos 2.260 metros cuadrados. Toda la estructura es completamente nueva, ha sido recién comprada por el Ayuntamiento en una inversión sin precedentes que en su conjunto -sumando también otros contratos relacionados- supera los 2,3 millones de euros. Así que por parte del Consistorio isleño se presenta como la gran novedad -y la gran apuesta- de esta señalada fecha. La tribuna sigue el diseño y la idea de la Carrera Oficial que se estrenó en la Semana Santa del año 2023, pero todo eso 'que no se ve' es nuevo y, además, es también ya propiedad municipal. La decisión de comprar las estructuras, por cierto, no es nueva. La Carrera Oficial anterior a 2023, que prácticamente ha estado 20 años en funcionamiento, también era propiedad del Ayuntamiento isleño.

Desde Lahyer se destaca que una de las ventajas que reportan estas estructuras es, precisamente, la versatilidad del sistema utilizado, que permitirá su uso en todo tipo de eventos y espectáculos que se celebren en la localidad a lo largo del año. "Es una inversión al nivel de los ayuntamientos más grandes", reconoce el fabricante, cuya sede se encuentra en la localidad sevillana de Dos Hermanas, que explica que tras esta adquisición el Consistorio isleño tendrá capacidad para montar no uno sino múltiples escenarios simultáneos con un sistema de montaje muy sencillo y rápido de instalar.

No existe una Carrera Oficial con un diseño y estructura similar a la de San Fernando, asegura también el fabricante, que ha trabajado para otras Semanas Santas -como la de Granada- si bien ninguna de sus experiencias previas tiene nada que ver con las peculiaridades del montaje isleño, que cuenta con un elevado número de palcos y tarimas. En este sentido, la instalación en grada que se lleva a cabo en el atrio del Ayuntamiento de San Fernando aprovechando la escalinata -que brinda la imagen más característica de la nueva Carrera Oficial al ubicarse allí la tribuna principal- supone uno de los principales desafíos de la estructura a pesar de su "aparente sencillez" al aprovechar los peldaños para distribuir de manera elegante los diferentes palcos.

El sistema para eventos desarrollado por la marca alemana Lahyer, asegura la mercantil, facilita enormemente el montaje. De hecho, es una de las principales ventajas de este tipo de estructuras: la rapidez y sencillez con la que se pueden instalar, lo que el fabricante llama "las bondades del montaje". Se ha visto perfectamente en San Fernando ya que la instalación de la Carrera Oficial, a pesar de ser nueva toda la estructura, se ha llevado a cabo en un tiempo récord, en tan solo unos pocos días.

Montaje de la Carrera Oficial de la Semana Santa de San Fernando / Julio González

Otra de las características que señala el fabricante es la elevada capacidad que tienen las estructuras al poder soportar hasta 700 kilos de peso por metro cuadrado, además de su calidad. "Se incorpora una estructura novedosa, que está a la vanguardia, es lo último en los sistemas de montaje para eventos", apunta.

Aunque externamente el diseño apenas cambia con respecto a la Carrera Oficial que San Fernando estrenó en la Semana Santa de 2023, tras la remodelación de la plaza del Rey, este año se ha afinado más con el montaje y se han añadido también algunas novedades, entre ellas, la decoración, que también es completamente nueva (a base de entelados en terciopelo con los escudos del Ayuntamiento y del Consejo).

Otra novedad será la decoración del palco institucional y del palco de toma de horas a la entrada de la Carrera Oficial, en la calle Real. Otra de las innovaciones que ya se aprecia desde hace unos días la brinda el entelado de los arcos del Ayuntamiento, el central completamente cubierto y el resto de arcos con cortinera.

La historia de la Carrera Oficial isleña

Cada remodelación de la Carrera Oficial que se ha emprendido a lo largo de la historia ha supuesto para la Semana Santa de San Fernando un hito que ha puesto a prueba a sus hermandades. Y al menos hasta ahora –con independencia de que siempre haya cuestiones pendientes que resolver o mejorar– siempre se ha superado este reto con bastante éxito.

Haciendo memoria, fue en 1993 cuando el Consejo de Hermandades y Cofradías afrontó la difícil solución de trasladar la Carrera Oficial desde la calle Rosario hasta Real. Aunque por entonces los palcos solo se extendían desde el tramo de la calle General Serrano hasta San Diego de Alcalá, aquello fue el principio de una nueva forma de concebir la Semana Santa.

Primitiva Carrera Oficial de la Semana Santa de San Fernando, en la calle Rosario / Rioja

Bastaría una década para que la demanda de localidades presionara al Consejo para negociar con el Ayuntamiento isleño una nueva ampliación, esta vez hasta la esquina de la plaza del Rey. Eso fue en 2005. Y fue el gran cambio.

Por primera vez se veía una Carrera Oficial acorde con la importancia de una ciudad que roza los 100.000 habitantes, tiene 22 hermandades de penitencia y presume de la Semana Santa como una de sus grandes fiestas y, sin duda, como la que tiene mayor capacidad para arrastrar a la gente hasta la calle.

Para muchas cofradías, llegar hasta la esquina de la calle Isaac Peral y regresar al templo se convirtió en un nuevo reto que obligó a reflexionar sobre cuestiones clave que todavía hoy siguen sobre la mesa: las horas de salida y recogida, la necesidad de que los pasos –y la procesión general– tuvieran un ritmo más ágil, de contar con cortejos más fluidos, de coordinarse con el resto de hermandades de la jornada de una manera más eficaz, de cumplir los acuerdos alcanzados previamente y respetarlas horas pactadas... Fue entonces también cuando tomó forma con fuerza la figura del vocal de día del Consejo, el responsable de coordinar la jornada, el interlocutor entre las hermandades que procesionan cada tarde. En definitiva, fue un auténtico punto de inflexión.

En 2011, con el empuje que brindó el éxito indiscutible de la Magna, se afrontó una nueva ampliación al sumar a los 361 palcos más de 400 sillas que llevaron la Carrera Oficial hasta la altura del Centro de Congresos.

En 2023, al hilo de la remodelación de la céntrica plaza del Rey, se planteó de nuevo un gran cambio al trasladar el grueso de los palcos al interior de la plaza del Rey y aprovechar también el atrio del Ayuntamiento para brindar un nuevo y monumental telón de fondo para la Semana Santa isleña. Así, este nuevo recorrido discurre por la calle Real entre el tramo de la calle General Serrano y la confluencia de Isaac Peral tras recorrer el interior de la plaza del Rey y pasar por delante de los palcos ubicados en la escalinata del Ayuntamiento, donde se ubica la tribuna principal con las autoridades.

Otra cuestión diferente, más allá del ámbito cofrade, es la relación que los ciudadanos de a pie han tenido con la Carrera Oficial a lo largo de las últimas décadas y siempre que se han querido tocar los palcos ha sido una cuestión bastante compleja y llena de aristas. No obstante, la última remodelación emprendida baja la altura de los palcos hasta casi a ras del suelo, que es lo que habitualmente deparaba las mayores quejas al impedir la vista de las procesiones.

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