Santo Entierro continúa con nuevas fases de la urna

El paso de la Urna de la hermandad del Santo Entierro estrenará el próximo Viernes Santo una nueva fase de ejecución. Se trata de un proyecto en el que la hermandad lleva inmersa más de una década y que poco a poco va viendo la luz para descubrir la majestuosidad de una obra realizada en ébano y plata de ley.

La cofradía del Viernes Santo recibió la semana pasada las nuevas piezas procedentes del taller de orfebrería sevillano de Jesús Domínguez y que han sido incluidas en el canasto delantero y trasero. Se trata de gallones, cabezas de ángel, carteles y apliques que, en algunos casos, están adornados por piedras preciosas de ónix, que son de color negro, y de ojos de tigre, marrones con betas de color de miel.

Por otro lado, la hermandad -según el estudio realizado por el teólogo que asesora a Jesús Bonilla, autor del diseño del paso- ha extraído la simbología de las cartelas que llevará la parte central de las cartelas de la tradición primitiva cristiana y del bestiario cristiano representado a través de la historia mediante diversas manifestaciones artísticas.

Así, en la canastilla delantera figurará el Ave Fénix, que simboliza el Cristo de la inmortalidad y de la resurrección, y en la trasera un pavo real, símbolo también de la resurrección y de la incorruptibilidad.

Las cartelas de las canastillas laterales se ejecutarán en siguientes fases y, aunque la hermandad aún no lo ha confirmado, casi con toda seguridad irán representadas por aves, que bien pueden ser el águila, emblema del triunfo de Cristo, de la resurrección y del cristiano; y la lechuza, que también aparece como símbolo de Cristo que se sacrifica para salvar a la humanidad.

Se trata, como reconoce la propia cofradía, de una simbología procedente de la religión católica que se nutre de la influencia de religiones paganas.

Por otro lado, la hermandad iniciará mañana la celebración de sus cultos con el besamanos de su imagen titular, María Santísima del Mayor Dolor en su Soledad. El acto finalizará a las ocho de la tarde con la celebración de la eucaristía.

Será el punto de partida del triduo que esta hermandad iniciará ya el próximo 26 y que culminarán en la jornada del Domingo de Pasión, en la que también estará expuesta en besapié la imagen del Cristo Yacente. Será el prior del convento del Santo Ángel de Sevilla, el fraile carmelita Juan Dobado Fernández el que se encargará de oficiar estos cultos cuaresmales.