La imagen de la Reina de los Ángeles volvió ayer tarde a recorrer las calles de la barriada Bazán coincidiendo con las fechas próximas a su festividad.

La asociación parroquial que tiene sede en la parroquia de la Sagrada Familia puso de nuevo de manifiesto la estrecha relación que existe entre el barrio y esta antigua talla durante una procesion de alabanzas que coincidió además con las tradicionales fiestas que la Bazán celebra a principios de agosto. 

Fue una tarde muy especial para la agrupación parroquial, que ha recuperado de nuevo la salida procional en el mes de agosto después de varios años llevándola a cabo en septiembre. 

El paso de la Virgen estuvo acompañado por la banda de música de la hermandad del Nazareno y portado por una cuadrilla de costaleros con Antonio Domínguez Sandoval al frente como capataz. 

La ofrenda ante el busto del padre Neira Prada y el paso del cortejo por la asociaciación de vecinos El Ancla y por las calles Nazaret, Revelación y Custodio, especialmente su paso por el bloque 9, donde la imagen de la Virgen estuvo antes de ser trasldada al templo fueron momentos especilamente emotivos en una tarde en la que se tuvo también un recuerdo para el padre Jesús Cortejosa.