El Instituto de Vivienda, Equipamiento e Infraestructura de la Defensa (Invied) ha solicitado al Ayuntamiento una prórroga del plazo inicialmente establecido -quince días a partir de la notificación- para intervenir en el cementerio de los ingleses con el propósito de restablecer la seguridad del conjunto tras la caída de uno de sus muros perimetrales, un suceso que se produjo a principios de enero dado el ruinoso estado y el avanzado grado de deterioro de esta edificación histórica, localizada en La Casería.

Lo ocurrido en este recinto, que desde 2012 está catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC) al considerarse parte del legado de Las Cortes y de la Constitución de 1812, llevó al Ayuntamiento a dictar un requerimiento a su propietario -esto es, al Ministerio de Defensa- para pedirle que tomara las medidas pertinentes ante el riesgo real de desprendimientos que existía en la zona, que incluso había tenido que ser acordonada por los bomberos. Una evaluación técnica del área de Desarrollo Urbano confirmaba además el mal estado de la estructura y enumeraba incluso varias actuaciones que consideraba necesario llevar a cabo para restablecer la seguridad en el entorno: fundamentalmente, la consolidación de los muros que quedan en pie y el desmontaje de piezas, sillares y elementos que amenazan con venirse abajo en cualquier momento. El coste de esta actuación de urgencia se cifraba en un primer momento en unos 7.000 euros.

El Invied, por su parte, confirmó ayer al Ayuntamiento por escrito su intención de intervenir en la zona del cementerio de los ingleses y le comunicó que se habían iniciado los trámites de obligado cumplimiento que exige la ley para llevar a cabo estas obras. Incluso informó de que, con fecha del pasado 19 de enero, se había procedido al abono de la tasa liquidadora, que asciende a 133 euros, y que se había iniciado el correspondiente expediente de solicitud de autorización a la Delegación de Cultura de la Junta de Andalucía al tratarse de un elemento catalogado como BIC. También ha colocado por toda la zona nuevos carteles advirtiendo del peligro de derrumbe.

Pero además ha solicitado una ampliación en los plazos establecidos para el inicio de las obras dada la imposibilidad de comenzar los trabajos en los 15 días fijados. Hay además uno de los puntos afectados -un cerramiento de fábrica de bloques prefabricados de hormigón que se ubica a escasos metros del muro lateral izquierdo y cuya demolición plantea el Ayuntamiento en su requerimiento- que el Invied alega que no es propiedad de Defensa.

Desde el Consistorio, la alcaldesa, Patricia Cavada, confirmó ayer la recepción de dicho documento y afirmó que hoy mismo se pondría en contacto el área de Desarrollo Urbano con los responsables técnicos del Invied para tratar la cuestión y trabajar en los plazos y en el inicio de las obras.

La actuación a desarrollar, en todo caso, responde a la urgencia de la situación y tendrá por objeto restablecer la seguridad dado el precario estado de la edificación. La rehabilitación del conjunto histórico, que se vincula también al proyecto de regeneración de la playa de la Casería, tendrá que venir después.