HE aquí una expresión muy gaditana cuyo significado es "jaleo, alboroto", y que puede tener relación con el tango gaditano, aunque ampliada en su sentido significativo. Ultimamente este término aparece más bien vinculado al mundo del Carnaval. Un programa de Canal Sur Televisión de hace unos años se denominó "El ritmo del tangai" y un coro del año 2000 se llamó "Se armó el tangai". Pues en pleno tangai se encuentra la ciudad en un día festivo como este lunes de Carnaval. La verdad es que el extraordinario ambiente se viene disfrutando desde todo el fin de semana, a partir de la Final en el Falla y el Pregón en San Antonio, con el largo preludio del Concurso en dicho Gran Teatro. Vivimos ya en estos días la plena calle. Es el turno de ésta. Porque las actuaciones en el Falla suponen un espectáculo brillante y extraordinario, pero si hablamos de Carnaval de verdad el tangai se arma en las calles de nuestro singular Casco Antiguo, que es el que presta el mejor escenario para todas nuestras fiestas y, muy especialmente, para la que es todo un escaparate de la ciudad. Una espléndida muestra de nuestra manera de ser y de sentir. La peculiar guasa gaditana se manifiesta como nunca en su fiesta más característica.

Es más que sabido que la importancia de nuestro Carnaval radica en las agrupaciones, que se hacen portavoces de un pueblo, que es, de todas maneras, el auténtico protagonista de estas alegres y multitudinarias celebraciones. Y matizando aún más, habría que decir que son las coplas las que ocupan el primer puesto de la fiesta. Los gaditanísimos tangos, los melodiosos pasodobles, los divertidos cuplés y parodias y los variadísimos popurrís llenan las esquinas de plazas y calles con sus acentos críticos o elogiosos, o con su invitación a la risa franca. En las coplas se demuestra el tremendo ingenio de los autores con una interpretación igualmente ingeniosa de los integrantes de coros, comparsas, chirigotas, cuartetos y hasta de los romanceros, con los que hay que contar cada vez más. El tangai, pues, está ya en la calle. Disfrutemos de él.