Este viernes será un auténtico día de alfombra roja para el escritor y cineasta gaditano José Manuel Serrano Cueto que, además de estrenar su cortometraje documental Yo quise hacer Los Binguros 2 en la madrileña Sala Berlanga, también verá sobre escena su pieza teatral Mira que somos fantasmas en el teatro del Círculo de Bellas Artes de la capital dentro de la obra colectiva ¡Qué bello es morir!

Dirigidas por Esperanza Lemos e interpretadas por Beatriz Rico, Fran Antón y Josele Román, cada relato de ¡Qué bello es morir! tiene la intención de burlarse del miedo a la muerte y demostrar lo divertido que puede ser el más allá. Así, autores como Serrano Cueto, Antonia San Juan, Màxim Huerta, Félix Sabroso, Alfonso Zurro, Alberto Velasco y Fernando J. López firman esta amalgama de sketches, de "comedias ligeras", como tilda el gaditano, al que le ha resultado una experiencia "muy divertida" poner en pie su pieza.

"La verdad es que estoy loco por verla porque las actrices me están mandando mensajes diciéndome lo bien que se lo están pasando haciendo la obra", confiesa Serrano Cueto que en Mira que somos fantasmas coloca a Josele Román en "la sala de espera del más allá". "Ella se encuentra allí un tanto perdida y no sabe muy bien qué le espera hasta que llega un chaval para indicarle qué tiene que hacer ahora que está muerta y resulta que es el espíritu de su marido que murió cuando era joven. El caso es que el chico (Fran Antón) está allí en el más allá liado con otra fantasma que es Beatriz Rico, así que se produce una situación muy divertida", resume el autor que también dota a su protagonista de cierta capacidad rebelde. "Josele digamos que también llegará al más allá a romper un poco las normas porque hablamos de una muerte muy encorsetada donde cada uno tiene que hacer un trabajo, con muchas resposabilidades... Y Josele va a cuestionar todo esto porque si después de toda una vida trabajando llegas a la muerte y tampoco puedes descansar...", explica el creador.

Además del doble estreno del viernes, Serrano Cueto tiene varios proyectos en cartera, entre ellos, uno que le toca de una manera "muy personal", el largometraje documental Caballas, que está rodando en Cádiz, su primer rodaje en su ciudad natal, y con su padre como uno de los protagonistas.

También en su última visita a Cádiz han comenzado los ensayos de El extraño caso del Dr. Toñito un relato de terror cómico inspirado en El doctor Jekyll y Mr. Hyde que el cineasta lleva a cabo con la empresa gaditana Puppets Marionetas.