Modelo a seguir

Retrato de anciano.
Retrato de anciano.

01 de agosto 2015 - 05:00

Bilbao me acoge, como no podía ser de otra manera, lloviendo a mares. Casi toda España muriéndose de calor y, allí, la gente con chubasquero, paraguas y rebequita. El día siguiente se levanta con chirimiri que va a más. Prometo por mi conciencia y honor que, un veintidós de julio, me he comprado un paraguas y de él no me he separado en tres días; pero Bilbao bien vale la pena, con lluvia y con paraguas en la mano. Dudas sobre si, primero al Bellas Artes y, después, al todopoderoso Guggenheim. Me decido por el primero; no todos los días la obra invitada a la institución museística bilbaína era una pieza prestada por el Museo Arqueológico de Jerez. Amabilísimamente me recibe María Amezaga, del Departamento de Comunicación del Museo; desde el vestíbulo principal, un largo pasillo donde se encuentra expuesta la serie "Cosmogónica vasca" de Nestor Basterretxea, nos conduce al hall Mogrobejo, llamado así por las obras del escultor bilbaíno Nemesio Mogrobejo que, allí, se encuentran. Enfrentada a la puerta principal del Museo nos topamos con la Obra Invitada, donde permanecerá hasta el 12 de octubre. Se trata de la primera pieza prestada que es una obra arqueológica, un magnífico retrato romano fechado en el último cuarto del siglo I antes de Cristo. Rosalía González, la Directora del Museo Arqueológico de Jerez, manifiesta que fue hallado a finales del siglo XIX en las obras de construcción de la carretera Jerez-Trebujena, formando parte de un yacimiento funerario. Es un retrato en mármol blanco, en muy buen estado de conservación, con algunos, muy leves desperfectos en la nariz, la barbilla y la frente, presenta un gran realismo, ajeno a la idealización. El autor plasmó las huellas del paso del tiempo, lo que descubre su importancia como artista. A este "Retrato de anciano", los vascos lo llaman "Agure baten erretraten".

Una vez deleitado con esta pieza del programa " La Obra Invitada", el Museo de Bellas Artes de Bilbao merecía mi detenida contemplación. Muy cerca de esta obra se encuentra "Misa mayor en una iglesia andaluza" de Joaquín Fernández Cruzado.

Como ya habíamos podido contemplar en otras visitas al Museo, el mismo se caracteriza por poseer obras importantísimas de autores importantes. No es un museo de nombres con obras de calidad incierta, cuando no dudosa. En el que dirige Javier Viar las obras son de suprema calidad. Su colección es extraordinaria. Piezas importantísimas del románico y del gótico - desde una "Majestad de Cristo en la cruz", obra anónima del románico catalán de la primera mitad del siglo XIII hasta "La flagelación de Santa Engracia" del pintor cordobés del siglo XV Bartolomé Bermejo -; obras de calidad insuperable de artistas de los siglos XVI al XIX, con nombres como El Greco - "San Francisco" y "La Anunciación" -, Francisco Herrera, el Viejo - "La Sagrada Parentela" -, José de Ribera - "San Sebastián curado por las santas mujeres" y "La Magdalena penitente" -, Bartolomé Esteban Murillo - "San Pedro en lágrimas" y "San Lesmes" -, Francisco de Zurbarán - "Santa Isabel de Turingia" y "La Virgen con el Niño y San Juan Bautista niño" -, Anton Van Dyck - "Lamentación sobre Cristo muerto" -, Francisco de Goya - "Retrato de Martín Zapater" y "Retrato de Moratín" -, Darío de Regoyos - El baño en Rentería" y "Viernes Santo en Castilla" -, Joaquín Zorolla - "El beso de la reliquia" y "Retrato de Unamuno", entro otros muchos -, Ignacio Zuloaga - "El cardenal", "Retrato de la condesa Mathieu de Noailles" y "La víctima de la fiesta" -, Hermen Anglada-Camarasa - "Desnudo bajo la parra" -, Isidre Nonell - "Pura, la gitana"-, Julio Romero de Torres - "La Venus de la poesía" -, o José Gutiérrez Solana - "Mujeres de la vida" y "Talleres de caretas"- entre muchos grandes de la pintura y la escultura con sus principales creaciones.

Pero si el Bellas Artes de Bilbao se nos presenta como un gran Museo, será su impresionante colección de piezas de artistas del siglo XX la que nos haga sentir que estamos en uno de los Museos más interesantes y completos que uno puede imaginar. Comenzando por "Virgen y mundana" de James Ensor, el visitante puede ingresar en un paraíso de arte actual ante una impresionante pintura de Jesus Mari Lazkano, "Homenaje a Gianbologno". Desde ellas, autores tan decisivos como Fernand Leger, Robert Delaunay, Pablo Gargallo, María Blanchard, Joaquín Torres García, el gran Alberto Sánchez, Pierre Alechinsky, Karel Appel, Henri Michaux, Pablo Palazuelo, Antoni Tapies, David Hockney, R.B. Kitaj, El Equipo Crónica, Jannis Kounellis, Mimmo Paladino, Andreas Schulze, Markus Lupertz, Jorg Immendorff, Joseph Beuys, Miquel Barceló, Ediuardo Arroyo, Francis Bacon, Lucio Muñoz, Manolo Millares, Pablo Serrano, Antonio Saura... y, por supuesto, los grandes artistas vascos de todos los tiempos: Eduardo Zamacois, José Echenagusía, Anselmo Guinea, Adolfo Guiard, Manuel Losada, Julián de Tellaech, Ángel Larroque, Benito Barrueta, Aurelio Arteta, Ramón de Zubiaurre, Juan de Echevarría, Gustavo de Maeztu, Jesús Olasagasti, Quintín de Torre, Antonio de Guezala, José María de Ucelay, Jorge Oteiza, Nicolás de Lekuona, Eduardo Chillida, Ricardo Baroja, Rafael Ruiz Balerdi, Remigio Mendiburu, Gabriel Ramos Uranga, José Luis Zumeta, entre otros.

RETRATO DE ANCIANO

Museo Arqueológico

JEREZ

stats