ocio nocturno

Un jarro de agua fría en pleno agosto

  • El sector hostelero en la provincia muestra su preocupación ante la nueva normativa

Horeca defiende que el cierre será contraproducente, ya que aumentará la presencia de jóvenes en la calle.

Horeca defiende que el cierre será contraproducente, ya que aumentará la presencia de jóvenes en la calle. / Fito Carreto

El presidente de la Asociación de Hostelería de Chiclana, Vittorio Cana, resumía la nueva normativa acordada entre el Gobierno central y las autonomías en relación con el ocio nocturno y los bares de copas como un “palo para el sector y un jarro de agua fría en pleno mes de agosto”. Sus palabras recogen el sentir del gremio al nivel provincial, tras entrar en vigor este lunes en Andalucía el cierre de los establecimientos nocturnos: la última de las medidas establecidas para reducir el aumento de casos de contagio por Covid-19. 

El portavoz del sector en Chiclana reconoce, sin embargo, que la situación “en determinados ámbitos relacionados con el ocio nocturno y la juventud estaba suponiendo un problema”, ya que ciertos locales presentan “una masificación y unas condiciones que no eran lógicas ante la actual situación de crisis sanitaria”. Pero esta iniciativa no es, considera, la solución más adecuada para atajar la situación. “No se puede decretar el cierre de este tipo de negocios sin haber intentado antes buscar otras soluciones menos drásticas –desarrolla–, algo que viene derivado de la falta de controles que existe por parte de la administración para evitar que se produzcan estas situaciones de riesgo y que perjudica a los que sí han cumplido con la normativa establecida desde un principio”.

Asimismo, desde el colectivo empresarial se teme que las restricciones que también se han establecido en aspectos como el horario de todos los locales de ocio y restauración, o la prohibición de fumar en la vía pública, empeoren aún más los ya de por sí preocupantes datos que venía ofreciendo el presente verano en relación con este sector, cifrando en un 50% la bajada de ventas aproximadamente que se viene registrando a causa de la actual crisis sanitaria.

“Será en estos próximos días cuando comprobemos el efecto real que tendrán estas nuevas medidas en el sector, para los que puedan seguir abiertos, al tiempo que esperamos que se fije algún tipo de compensación o ayudas para los que han tenido que cerrar sus puertas”, concluye el presidente de los hosteleros de Chiclana.

La Sala Milwaukee, uno de los locales más emblemáticos de El Puerto, afronta su cierre temporal ante la nueva normativa. Los responsables del local han anunciado que, pese a los esfuerzos realizados para mantener su programación musical con los horarios y controles exigidos, el comunicado de la Junta de Andalucía publicado en el BOJA les obliga a cerrar “hasta nueva orden”.

La prestigiosa sala portuense –que ofrecía música en directo en horario de noche, dentro del ciclo SummerJazz 2020– ha lanzado sin embargo un mensaje de esperanza a sus asiduos: “Hemos parado, pero la música seguirá”, afirma su propietario, Juan Carlos Anelo, en un vídeo, ofreciendo un mensaje de ánimo a todos los establecimientos que ofrecen conciertos y a cuantos les han apoyado.

También se ha visto afectada, aunque en menor medida, la programación musical de Soko Fest El Puerto, que ha tenido que readaptar sus horarios a la nueva normativa, detallando estos cambios en las redes sociales. El hecho de que se haya fijado el cierre a la una de la madrugada les obliga a algunas restricciones, ya que no podrán mantener la música con disc-jockey que ofrecían al público después de cada concierto, cuando el lugar se transformaba en una sala de esparcimiento al aire libre, aunque la programación de los cantantes anunciados sigue adelante, readaptándose al lema “el espacio de ocio seguro más grande de Andalucía”.

En cuanto a los conciertos incluidos en el Cabaret Festival, que se viene celebrando en la Plaza de Toros, estos no se verán afectados en modo alguno por las limitaciones al ocio nocturno, toda vez que finalizan a las 00:00 horas.

En la noche del pasado domingo, el alcalde portuense, Germán Beardo, comunicaba a través de las redes sociales la entrada en vigor de las nuevas normas y subrayaba que las discotecas “tienen prohibido abrir, y también los pubs que no oferten comida”. Así, discotecas como Guateque, ubicada, en el edificio del Resbaladero, han cerrado sus puertas, mientras locales de moda como La Cristalera, uno de los sitios emblemáticos de la noche portuense, situado junto al río Guadalete, ha incorporado un catering, introduciendo la restauración en su carta.

En San Fernando, el cierre de bares, discotecas y locales de ocio nocturno decretado por el Gobierno central ante los rebrotes del Covid se ha encajado con relativa normalidad. No se ha registrado ninguna incidencia en estos primeros días en los que estos establecimientos han tenido que echar la baraja de nuevo, aunque desde el sector –especialmente castigado por la crisis del coronavirus– no se oculta su preocupación ante este nuevo varapalo económico y ante las consecuencias que acarreará.

La Isla, a diferencia de otras localidades vecinas de la Bahía, no es un municipio en el que el ocio nocturno sea un sector económico especialmente destacado, ni siquiera durante los meses de verano, aunque indiscutiblemente hay zonas del centro en las que sí conviven varios locales y negocios de este tipo que ahora viven sus semanas clave. Y las nuevas restricciones puestas en práctica suponen, evidentemente, un nuevo varapalo en un crítico momento.

Con todo, la Asociación de Hostelería y Turismo de San Fernando (Asihtur) se ha mostrado comedida en sus comentarios. Eso sí, ha aprovechado para reclamar de la administración más ayudas y herramientas que pemitan al sector del ocio nocturno capear este nuevo revés.

Su presidente, Antonio V. Páez, ha destacado la “total normalidad “con la que se han desarrollado las primeras horas de la puesta en marcha en San Fernando de las nuevas medidas”. Los establecimientos asociados “han cumplido estrictamente con los nuevos horarios de atención a clientes y cierre” y ha subrayado la colaboración y la buena disposición de los clientes a la hora de acatar las nuevas limitaciones.

Por su parte, la Asociación de Comerciantes de Vejer (Acove) manifestaba en redes sociales su “descontento y malestar” ante la entrada en vigor de la nueva normativa, la cual “no ha dejado margen de maniobra a un sector como es el de la hotelería”.

“Un decreto que es publicado esta tarde (por el lunes) cuando todos los negocios tenían su horario habitual y no han podido cambiarlo ni avisar a sus clientes con antelación porque ha sido publicado muy tarde –desarrollan en su comunicado–. Un decreto que no ha tenido en cuenta la previsión de un negocio en cuanto a trabajo, provisiones ni a trabajadores y por ello nos preguntamos quién va a correr con los gastos que supone esas pérdidas?. Un decreto que no ha tenido en cuenta al sector que por otro lado es el que puede llegar a sustentar un pueblo. Las normas están para acatarlas pero con un margen de actuación para poder ofrecer el mejor servicio”.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios