La Cooperativa Vitivinícola 'Virgen de la Caridad' de Sanlúcar celebró ayer la recuperación de la totalidad de las acciones de Bodegas Caydsa, la firma que vendió en noviembre de 2009 a Nueva Rumasa, tras haber alcanzado un acuerdo con las sociedades Zoilo Ruiz-Mateos, Ajerezada y Ceslow Business, además de nueve avalistas: Clesa, Bamingo Canarias y el propio empresario José María Ruiz-Mateos y sus hijos.

Se trata de un acuerdo transaccional suscrito tras "laboriosas y complejas negociaciones, sobre todo, con los actuales administradores concursales" en virtud del cual se resuelve la venta en cuestión, valorada en 12 millones de euros -de los que cuales Nueva Rumasa sólo abonó a la cooperativa algo menos de 800.000 euros-, con la consiguiente recuperación de todas las acciones de las citadas bodegas, que conservan en la actualidad el nombre de Teresa Rivero. Con todo, la entidad sanluqueña debe aún esperar la homologación de dicho convenio por parte de la magistrada del Juzgado de lo Mercantil Número 1 de Cádiz, que es la instancia competente en el procedimiento abierto el pasado mes de abril por la solicitud de la cooperativa relativa a la resolución de la venta.

La junta rectora de Virgen de la Caridad prevé que la admisión judicial del acuerdo se produzca "en breves días". Así las cosas, considera haber logrado su principal objetivo: "la recuperación de un patrimonio, hoy en concurso de acreedores, adquirido al paso de los años con el esfuerzo y sacrificio de sus socios", que suman actualmente unos 700. Ahora, la entidad presidida por Juan Juez pretende hacerse con la dirección y la administración de Bodegas Caydsa "en el más breve plazo de tiempo posible", un fin "del que sólo nos separa el trámite formal" de la homologación judicial.

El asesor jurídico de Virgen de la Caridad, el abogado José Gómez Villegas, que ejerció como portavoz de la misma en la comparecencia pública de ayer, manifestó que la citada operación de los 12 millones "se olvida ahora, porque lo importante es que la cooperativa volverá a hacerse con Bodegas Caydsa y, en cuanto tome posesión de la empresa, evaluará las posibilidades que tiene de recuperar el crédito real".

Preguntado por la deuda que Ruiz-Mateos mantiene con la cooperativa sanluqueña por la compra de mosto, Gómez Villegas la cifró en casi dos millones de euros antes de aseverar que "esa reclamación sigue dentro del concurso de acreedores". "La cooperativa intentará cobrar esa deuda. Es un crédito por el que habrá que seguir luchando, si bien somos realistas y sabemos que es muy difícil. En todo caso, habrá que esperar a que termine el concurso de acreedores, donde la cooperativa está reconocida como acreedora de Zoilo Ruiz-Mateos. Lo que sí acaba es el procedimiento judicial por la compraventa de las acciones", explicó.

Con respecto a las decisiones que tomará la cooperativa cuando entre en Caydsa, la junta rectora no quiso adelantar nada argumentando que "primero queremos saber exactamente cuál es la situación real en la que se encuentra". "El paso que hemos dado es fundamental. Teniendo en cuenta la situación complicada en la que estábamos, nos alegramos", reiteró Gómez Villegas.