El fraude de ayudas de la UE en Cádiz implica a una sola empresa de Jerez

A fecha de hoy, la Fiscalía de Cádiz considera que únicamente hay una empresa de la provincia que podría haber incurrido en un delito de fraude en la gestión de las ayudas recibidas por la Unión Europea para la creación de empleo. Se trata de la empresa Qualytel Teleservices S.A. radicada en Jerez.

Aunque la Guardia Civil detectó irregularidades en medio millar de empresas de la provincia, las investigaciones realizadas tan sólo permiten en principio atribuir a Qualytel un supuesto delito de fraude al ser la única que superaría los 120.000 euros, la cantidad mínima establecida para la concurrencia de este ilícito penal.

Es el Juzgado de Instrucción Número 1 de Cádiz el que tramita las diligencias, encargándose de las investigaciones la Guardia Civil con la fiscal Anticorrupción. Según las fuentes consultada por este diario, se especulaba con que era una cantidad de 318.000 euros la que podría haber defraudado la firma jerezana, percibiendo ayudas para la contratación por ese importe que finalmente no habrían cumplido las exigencias establecidas para beneficiarse de estas subvenciones comunitarias: la duración de contratos de personal por un mínimo de cuatro años. No obstante, hace escasas fechas que se ha recibido un informe de la Junta de Andalucía que reduce la posible estafa a una cantidad "sensiblemente inferior". Un descuadre de cuentas que ahora deben analizar los responsables de la investigación.

Fueron efectivos de la Comandancia de Cádiz los que, en 2009, detectaron irregularidades en las ayudas en unas 800 empresas, 500 de ellas de la provincia, de las que dieron traslado a la Fiscalía de Cádiz. Y desde el Ministerio Público gaditano remitieron el asunto a la Fiscalía del TSJA, por afectar a otras provincias andaluzas.

La instalación de Qualytel en 2005 en Jerez, tras ganarle la partida a Cádiz y Puerto Real, despertó grandes expectativas de empleo en una ciudad y una provincia muy castigadas por el paro, pero la trayectoria de la empresa de telemarketing ha estado salpicada de conflictos laborales, que alcanzaron su máxima expresión en el 2009 con la pérdida del proyecto de Orange, que entre enero y junio de ese año prescindió de los servicios contratados en la ciudad. Un revés al que la empresa respondió con el despido de 300 trabajadores y la presentación posterior de un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) para otros 200.

La cesión de la Facultad de Derecho por acuerdo de pleno fue decisiva para la instalación de la empresa en Jerez, donde Qualytel comienza su andadura en junio de 2005 con el proyecto de Orange y 400 trabajadores, plantilla que en apenas un año alcanzó los 1.500 trabajadores tras la incorporación de los proyectos de ING Direct y ONO. Desde entonces, la empresa ha ido compensado la pérdida de unos proyectos con la llegada de otros, caso de Salud Responde, o de Vodafone, si bien la plantilla se vio mermada hasta rondar en la actualidad el millar de empleados.

La mayoría de los 300 despedidos acudió a los tribunales para terminar ganando la batalla a la empresa, que tuvo que hacer frente al pago de las indemnizaciones por despidos improcedentes.

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