“La inmigración ha venido para quedarse”. La frase es de José Pacheco, subdelegado del Gobierno en la provincia de Cádiz, y la pronunció en el transcurso del acto de clausura de una jornada de actualización de conocimientos en materia de inmigración irregular para profesionales y primeros intervinientes desarrollada ayer en la Comandancia de la Guardia Civil de la capital gaditana. La inmigración ha venido para quedarse. No sólo es una sentencia, es más una advertencia, un hay que ponerse las pilas, un vamos a acostumbrarnos porque no estamos ante una crisis humanitaria pero sí ante un cambio en el flujo migratorio.Junto a Pacheco clausuró la jornada el general jefe de la IV Zona de la Guardia Civil, Manuel Contreras, que a su vez ostenta el mando único instaurado por el Gobierno a imagen y semejanza del que se diseñó en la denominada Crisis de los Cayucos que se dio en Canarias en 2006; y Alfonso Rodríguez Castillo, coronel jefe de la Comandancia gaditana. La jornada se dividió en dos grandes bloques, el primero de los cuales de marcado carácter policial y por tanto reservado para profesiones, y el segundo, en el que intervinieron diversos actores externos a los cuerpos de seguridad y al que los medios de comunicación tuvieron libre acceso.

La experiencia del mando único en la crisis de los Cayucos de Canarias ha servido para engrasar los mecanismos actuantes

El general recordó que a partir del 15 de julio se produjo una llegada masiva de inmigrantes a las costas gaditanas “y nos encontramos con un montón de actores con un trabajo extraordinario de cada uno, pero estábamos trabajando mirándonos el ombligo y a nuestro propio ritmo. Nos dimos cuenta que hacía falta un poco de aceite para que la maquinaria funcionara mejor y por eso se tomó como modelo lo que se hizo en Canarias. Siempre bajo la premisa fundamental de salvar vidas humanas”.

Diversidad enriquecedora

El subdelegado por su parte comentó también que la diversidad es enriquecedora y que “la inmigración es una realidad que vamos a seguir viviendo en años venideros. Hemos estado observando un incremento exponencial en las cifras de inmigrantes irregulares a nuestro país, y por tanto era previsible que esto iba a ocurrir. Todos hemos sufrido un mes de julio vertiginoso atendiendo a personas que llegan de sufrir un infierno, que arriesgan sus vidas para llegar aquí y que no podíamos mirar para otro lado”.Por su parte el coronel Alfonso Rodríguez Castillo destacó la implicación de todos los cuerpos para sacar adelante situaciones comprometidas y se congratuló del éxito de participación que habían tenido unas jornadas conducidas por el teniente coronel Luis Martín.Durante la mañana pasaron por la jornada representantes de la Guardia Civil de Barbate, de Cruz Roja, Policía Nacional, Policía Local, Junta de Andalucía o el portavoz de la Oficina Periférica de Comunicación de la Benemérita, Manuel González Ramírez. Entre todos dibujaron una radiografía certera de cómo tratar a estas personas que llegan tras una odisea y que, ante todo, necesitan atención, alimentos, ropas secas, pomadas para curar las quemaduras provocadas por la sal y la gasolina y, por supuesto, un poco de solidaridad.