El Gobierno de España está recabando información sobre el incidente producido el pasado martes entre la Policía de Gibraltar, la Royal Navy y la Guardia Civil, en aguas de la Bahía.

Según pudo confirmar ayer este diario, el Gobierno español está analizando de manera pormenorizada todos los informes de los que dispone, entre los que figura el de la Guardia Civil, para actuar en consecuencia.

De momento no ha habido reacción a lo ocurrido por parte del Gobierno español, aunque sí por parte del Ejecutivo de Gibraltar, que calificó de inaceptable el incidente y cuestionó la viabilidad de la cooperación entre la Royal Police y la Guardia Civil, así como el cierre de acuerdos en esta materia en el seno del Foro de Diálogo. En un escueto comunicado, el Gobierno del Peñón agregó que se "toma muy en serio el comportamiento abusivo" de la Guardia Civil y que está considerando los efectos que este incidente puede provocar.

El senador del PSOE José Carracao aseguró que no ve intención en el Gobierno de Gibraltar de romper el diálogo con España tras lo ocurrido y atribuyó la dureza del comunicado oficial del Peñón "a la necesidad de tener un gesto de contundencia frente a la presión de la oposición gibraltareña, que intenta situar en primera línea del debate los incidentes con España". Para el senador, romper el diálogo existente "demostraría la incapacidad de las partes de colaborar en asuntos que preocupan a la ciudadanía".

Además, se mostró confiado en la voluntad del ministro principal de Gibraltar, Peter Caruana, de que el Foro de Diálogo dé sus frutos y reiteró la necesidad de cerrar un protocolo de actuación entre las fuerzas de seguridad de ambos lados para prevenir la delincuencia y los accidentes marítimos dejando a un lado el litigio sobre la soberanía de las aguas. Al respecto, dijo que se podría emplear una "fórmula similar" a la alcanzada para el uso conjunto del aeropuerto.

El diputado del PP José Ignacio Landaluce volvió ayer a pronunciarse sobre el incidente, que calificó como "el más vergonzante en la historia de la Guardia Civil en aguas de la Bahía de Algeciras" y lamentó que no haya habido un pronunciamiento oficial por parte del Ministerio de Asuntos Exteriores.

Landaluce consideró "un acoso desproporcionado" la intervención de la Royal Police y la Royal Navy, y aseguró que España no debe aceptar ninguna explicación de Gibraltar que no sea "una disculpa oficial y la firme promesa de que ha sido la última vez que las autoridades de la colonia se interponen en la labor de la Guardia Civil".

Además, aseguró que el comisario de la Policía de Gibraltar se desplazó hasta el lugar de los hechos para amenazar a los guardias civiles diciéndoles "que estaban rodeados por embarcaciones armadas y por tanto, en disposición de actuar, lo que es una amenaza". También dijo que el tripulante de la embarcación envuelto en el incidente es español "y por tanto, es responsabilidad y obligación de la Guardia Civil hacerse cargo de su custodia por haber sido interceptado en aguas españolas sin ningún género de dudas".