El Conservatorio inicia sus clases en el antiguo edificio de San Agustín

Improvisados coros infantiles y notas procedentes de instrumentos musicales surgían ayer de las ventanas abiertas del antiguo colegio de San Agustín. Hacía años que el edificio no recibía alumnos en sus aulas y ayer volvió a recuperar su vocación docente después de mucho tiempo. Hasta 240 estudiantes de edades comprendidas entre los 8 y los 12 años comenzaron sus clases en el Conservatorio Elemental Rafael Taboada, que inicia así una nueva andadura entre los muros de este antiguo convento, tras permanecer 17 años en la Casa de la Cultura.

Según Ricardo Vega, director del Conservatorio, la normalidad fue la tónica en el primer día del nuevo curso. Pese a la premura de la mudanza y a que la dirección y los profesores han tenido que trabajar duro para tenerlo todo preparado, hasta 80 nuevos alumnos pudieron tomar posesión de sus aulas y conocer a los profesores que les guiarán en su aprendizaje musical.

Este curso se ha batido el récord de entrada de nuevos alumnos en el Conservatorio, ya que la Junta ha ampliado el número de plazas, al contar el antiguo colegio de San Agustín con más espacio que la Casa de la Cultura. Prácticamente toda la primera planta ha sido reformada para instalar las 13 aulas de las que se compone el centro, que ha visto además ampliada su plantilla hasta los 13 profesores, con la incorporación de dos nuevos docentes. El Conservatorio de Grado Elemental se compone de cuatro cursos, basándose sobre todo el aprendizaje en técnicas básicas de instrumentos y solfeo.

Por otra parte, no parece que como temían algunos padres se hayan producido inconvenientes graves por la escasez de espacios para estacionar el vehículo a la hora de dejar a los niños en el centro, cuya entrada se mantiene por la calle Misericordia.