Cientos de caperucitas rojas y algunos lobos feroces han formado parte este martes de la cabalgata de Halloween organizada por el Ayuntamiento, una comitiva que a pesar  de la amenaza de lluvia finalmente ha podido realizar  el recorrido previsto.

Cuatro carrozas formaban parte del recorrido, una de ellas protagonizada por El Grinch, mientras que el personaje de Caperucita era el hilo conductor de las otras tres.

En el recorrido tomaron parte también varios colectivos deportivos de la ciudad, con numerosos niños y niñas que participaron en el cortejo festivo.

Pero no ha sido esta la única cita organizada por el Ayuntamiento con motivo de Halloween. El edificio de San Agustín, donde tiene su sede el Conservatorio de Música, se ha puesto en marcha una casa del terror, mientras que el edifico de San Luis también ha albergado distintas actividades organizadas por la Concejalía de Juventud.

Por otra parte también las actividades organizadas por la basílica de los Milagros han contado con una gran aceptación, dentro de la iniciativa denominada ‘Holywins’, con la que se quiere conmemorar la cultura de la vida frente a la de la muerte que representa Halloween.

La plaza de España, curante la celebración de Holywins.

Esta cita religiosa nació en el año 2002 en París, y han sido los obispos y distintas parroquias quienes han apoyado su implantación en España.

Por otro lado, distintos centros educativos de la ciudad se han sumado a la celebración de Halloween, con la realización de manualidades y decoraciones alusivas a esta cita.

Así, colegios como La Gaviota han puesto en marcha, gracias a la colaboración del AMPA, una decoración especial centrada en el Día de Muertos, una tradición muy arraigada en México, mientras que el centro de Educación Infantil Las Dunas se ha realizado una escenografía de Harry Potter, incluyendo una breve representación para los alumnos de cada curso en la que se ha contado con los personajes principales de la historia. Por su parte el colegio Pinar Hondo ha montado un pasaje del terror basado en una prisión, que los alumnos de las diferentes clases han ido atravesando, adaptándolo el colegio a la edad de los participantes.