Hace 50 años se celebró en la Plaza de Toros de El Puerto de Santa María un acontecimiento muy especial. Joaquín Camacho Graván y María del Carmen Ruiz González se casaron en la capilla del coso taurino, en la que ha sido hasta la fecha la única boda que se ha celebrado en este monumental edificio portuense, declarado Bien de Interés Cultural.

Eran las diez de la mañana del lunes 10 de abril de 1972 cuando la pareja contraía matrimonio en el mismo lugar donde tantos toreros se encomendaban antes de salir al ruedo, dando origen a una noticia insólita, que fue reflejada en la prensa en muchas partes de España, como información, anécdota o eco de sociedad, ya que se trataba de la única boda que consta desde la construcción del coso taurino portuense en 1880. Joaquín Camacho había llegado para trabajar como conserje en la Plaza Real y no dejó pasar la ocasión para organizar allí mismo el enlace, contando con el beneplácito de las autoridades. 

Según las crónicas del momento, el acto contó con la presencia de numeroso público, ya sea porque formaban parte de los invitados o por el sitio en que se celebraba, encontrándose la capilla "profusamente exornada" con flores. El enlace fue oficiado por el capellán Manuel Salido Gutiérrez. Como no podía ser menos, dada la situación, la novia hizo el 'paseíllo' del brazo de su padre y padrino, Antonio Ruiz Alcón, festejándose el banquete nupcial en unas mesas instaladas en el ruedo, con la presencia de numerosos invitados y representantes del mundo taurino. Para completar la jornada, los novios salieron a hombros de la plaza, para iniciar la luna de miel.

La boda celebrada en 1972 en la Plaza de Toros de El Puerto.

Cincuenta años después, este próximo sábado el matrimonio conmemora el 50 aniversario de aquella boda histórica, repitiendo el enlace en la misma capilla de la Plaza de Toros, a las 11:30 horas. En esta ocasión lo harán rodeados de sus hijos y sus nietos, amigos e invitados, a la vez que se instalará una pantalla en el exterior para aquellas personas que quieran compartir ese momento, ya que la capilla tiene unas dimensiones muy reducidas. Las bodas de oro serán oficiadas por el párroco de San Marcos, Antonio Durán.

Joaquín Camacho espera la llegada del aniversario y confiesa junto a su mujer que están muy ilusionados por poder vivir de nuevo aquel acontecimiento, para lo cual han invitado al alcalde y concejales de la Corporación. En este tiempo, no sólo han formado una familia, también, como gran aficionado taurino, Joaquín ha escrito varios libros imprescindibles sobre la Plaza de Toros portuense, cuya historia y festejos conoce a la perfección, incluso el más modesto, llegando a crear una colección de carteles y una documentación muy completas, que abarcan desde el mismo día de la inauguración de la plaza hasta la fecha actual.      

Con la conmemoración de sus Bodas de Oro, la pareja renueva su compromiso personal, pero también su vinculación con el monumento más visitado de El Puerto, en cuya historia sentimental entraron por la Puerta Grande.