Ayer, al caer la tarde, un bote de pesca que venía de arribada naufragó en la laja de piedra conocida como 'Tabladillo', frente a los baños del Carmen, en la Alameda Apodaca.
Los pobres náufragos comenzaron a dar voces, mientras el público se agolpaba en la muralla. Se dieron las alertas y salieron del muelle varios botes para rescatar a los náufragos, pero la noche se echaba encima.
En la Alameda las mujeres rezaban y los hombres encendieron varios faroles para orientar a los rescatadores y tranquilizar a los náufragos. Con noche cerrada y cuando parecía que la marea iba a tragar a los desgraciados, uno de los botes consiguió acercarse y trasladar a la tripulación, entre la que se encontraba un niño de corta edad. Desde la Alameda el público aplaudió emocionado.
Comentar
0 Comentarios
Más comentarios