La edil de Cultura y Fiestas del Ayuntamiento de Cádiz, Lola Cazalilla, ha realizado este jueves un balance del Carnaval 2023 calificándolo como “uno de los mejores de los últimos años” y “muy parecido al de los anteriores a la pandemia” con la sensación incluso de “haberlos superado”. Un Carnaval “de lujo” sin incidentes “reseñables” a pesar de que, según las cifras que maneja el Consistorio, el primer sábado llegaron hasta la ciudad un millón de personas y 900 autobuses.

Valoró positivamente la “potente” apuesta por la infancia con actividades “todos los días de la semana” y la oferta “infinita” para el público adulto con carruseles de coros, circuitos de agrupaciones o batallas de coplas, amén de las actuaciones de las agrupaciones callejeras y de las actividades organizadas por peñas y entidades. “Cada persona ha podido disfrutar de su carnaval particular, y eso siempre es bueno”. También, la oferta de conciertos fue “potente y variada”, con la plaza de San Antonio “a rebosar” con espectáculos “de nivel”. Ensalzó asimismo el “espectacular” ambiente del 28-F, ya fuera de la semana de Carnaval, con las actuaciones de coros, premiados en adultos y la batalla de coplas de la cantera, además del concierto de María Peláe.

Los macrobotellones

Calificó como “magnífica” la respuesta del público, que cada vez viene “con más ganas de escuchar carnaval”, pues tras muchos años de pedagogía “va calando el mensaje de que en esta fiesta sobra el botellón”, siendo también importante “el aumento de las actividades programadas y de las agrupaciones en las calles. Al hilo de este asunto apuntó que “el propio sábado de Carnaval ya salen agrupaciones callejeras, cosa que no ocurría hace unos años. Hay mucha gente que entiende ya que ese día se pueden escuchar coplas”.

Preguntada por la masificación el primer fin de semana y la proliferación de macrobotellones, Cazalilla recordó que se trata de un “fenómeno a nivel mundial en cualquier gran fiesta” y que no queda otra que “seguir educando y condenando estos comportamientos que no son bien recibidos”, insistiendo además en la necesidad “de ofrecer muchas alternativas en el programa”. Sobre la opción de habilitar un espacio alejado del centro de la ciudad para el botellón, la edil dijo que es una posibilidad, pero advirtiendo que “no se puede prohibir a la gente que lo haga en otro sitio”.

Las cabalgatas

Cazalilla destacó la calidad de las carrozas de la cabalgata magna, precisando que, ante la ausencia de agrupaciones del COAC, el Ayuntamiento se plantea que vuelvan al cortejo de manera organizada, con algún acicate en forma de premio. “Estamos estudiando un desfile dentro de la misma cabalgata en el que las agrupaciones vayan impecablemente disfrazadas y maquilladas. No me gusta que vayan bebiendo y haciendo botellón, pues para nosotros la cabalgata es algo muy serio”. También habló del “toque gaditano y familiar” de la cabalgata del humor, incidiendo en lo acertado del cambio de recorrido aplicado en 2020. Un desfile con “más inversión y más cuidado”.

Los pregones

Destacó el “hito” que supuso el pregón infantil al alimón entre dos chicas, Laura Grimaldi y Claudia Pastrana, como “muestra de compañerismo”. La "gran labor" de Joaquín Quiñones en el pregón oficial, "que derrochó maestría sobre las tablas. Un pregón merecido y de justicia". Y un agradecimiento a Faly Mosquera, "que también nos emocionó con el pregón del Gran Momo en una noche mágica".

Los romanceros

Lola Cazalilla recordó la cifra histórica alcanzada en el concurso del cartelón, con casi el doble de inscritos. "Ha habido una buena acogida a este modelo de concurso, en el que se sienten a gusto. Y se ha alcanzado un nivel excepcional", relató. Sí rechazó, a título personal, la idea de incluir en el concurso oficial a los romanceros infantiles, de la escuela creada entre la Flampa Gades (Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos) y la Asociación de Romanceros. "Han nacido de manera muy bonita, sin competición, con otros valores. Si ambos colectivos lo creyeran oportuno, pues adelante. Pero personalmente creo que no deberían caer en eso. La competición haría perder algo muy bonito que se está gestando y no es algo que los niños hayan pedido". 

Las carpas

La edil valoró también la apertura de tres carpas por parte de la empresa adjudicataria, la empresa Francisco Toro, un asunto que ha supuesto evitar "aglomeraciones" al repartirse el público entre Santa Catalina, Renfe y el Baluarte de la Candelaria. Tres carpas que no han funcionado a la vez algunos de los días del Carnaval. "El cierre de una o dos de ellas algún día responde al criterio del empresario, que puede hacerlo según el pliego de condiciones del contrato. La gente fluye y el empresario decide qué es lo mejor para sus intereses. Nosotros sí le pedimos que nos informara cada día sobre qué carpas estarían abiertas para poder informar de ello". 

Concurso de tanguillos

Cazalilla se refirió a las críticas de participantes y familiares por el hecho de que en la final del concurso de tanguillos se quedaran desiertos algunos premios. "La polémica es con el jurado, cuyo criterio es el que ha mandado en este caso. Tengo pendiente una reunión con el jurado para hacer balance del concurso y ahí escucharé sus razones", manifestó. Y añadió que "quizás en años posteriores habrá que adaptarse a lo que el concurso es, que a lo mejor no tiene que tener una excelencia profesional pues ya tiene otras características identitarias. Pero los premios dependen del jurado y el del año que viene lo mismo tiene otros criterios".