Una guerra de coplas en defensa del pueblo. El coro del Chapa se estrena en la Gran Final haciendo valer su principal valor, que es la pluma de García Argüez adaptada al tango. Guardando las formas clásicas, echan el cierre a la modalidad destacando en aquello que les distingue: el mensaje del repertorio y las letras de los tangos, aunque con algo menos de prestancia por los planteamientos. En el primero, vuelven a retorcer el concepto de patria pero desde un punto de vista mucho más literario para dirigirse hacia un remate en el que la patria más grande es su madre. Aunque con alguna sentencia discutible, resalta la alerta que realizan en la segunda copla por el ascenso del fascismo en la sociedad, un virus que “no distingue entre clases sociales”, por lo que “no hay quien lo pare” en un país en el que consideran que “está en su ADN”. Dan un importante paso atrás con dos cuplés bastante flojos, en los que su primo sabe de todo pero no se entera de los cuernos y se lían tanto con el GPS que acaban en la misma Utrera. 

Actuación en semifinales

El tipo: Milicias en las trincheras. Las coplas: Una batalla contra los políticos. El regimiento de la gente que defiende al pueblo. Un canto a la libertad con el que el coro del Chapa mantiene su paso firme por el Concurso, sobre todo porque la temática se amolda mucho a la pluma y las ideas de García Argüez. Afilado en la crítica, este grupo goza de una línea ascendente en su propósito de estrenarse en la GranFinal. Una senda en la que las letras funcionan al mostrarse directas y sin cortapisas con dos tangos de corte crítico. Aunque ya ha salido este tema a lo largo del Concurso, saben construir bien la primera copla al problema de la turistificación de Cádiz a partir de todo lo que la ciudad ofrece al forastero. Un giro del piropo a la denuncia en su justa medida para recordar a los turistas que Cádiz “no es un parque temático”, por lo que rematan con mucho tino que no rechazan el turismo, pero que deje “que también vivan los gaditanos”. El segundo, aunque sin excesos, se vuelve mucho más duro al denunciar la represión policial durante la huelga del metal a partir de la historia de José Antonio, un antidisturbios en Cádiz que no es más que “un perro” que defiende “su hueso duro y el de su amo”. No se vienen abajo en los cuplés. Quizás, un poco por debajo el primero a que van a comer al restaurante de Ángel León, pero al ver los precios piden “un carajo de La Caleta”. Más simpático el segundo, en el que recomiendan a la princesa Leonor que haga un Grado Medio de Peluquería. 

Veredicto de Diario del Carnaval

Buena.

Actuación en preliminares

El tipo. Milicias en las trincheras. Las coplas. El pueblo solo salva al pueblo, por lo que es el único que dará la cara en sus luchas. Ni políticos ni banqueros ni Dios, por lo que los soldados cavan sus trincheras para ganar esta guerra. El coro del Chapa regresa a la buena senda tras elegir el camino que más réditos le ha dado en la modalidad de coros, como es el de la crítica, que maneja mucho mejor por su forma de escribir. Una pluma que se ve especialmente lúcida en la presentación al enmarcar la lucha de estas milicias y en algunos momentos de un popurrí con mucho fondo. Además, destacan los sones clásicos de la música del tango, sin complicaciones y sin desviarse de los cánones. Bastante llamativo el primer tango dedicado a Kiko Zamora a partir del recuerdo a los coristas viejos, por lo que a partir de ellos aprovechan para hacer un homenaje a los que están vivos. Por ello, como “compañero”, le dicen que “aunque estés lejos, Cádiz te quiere y te añora”. Bastante destacable el segundo tango en contra del racismo a partir de historias con nombres de inmigrantes que se ganan la vida con su trabajo, por lo que “cuando estén en el tajo atrévete a gritarle que están quitándote tu trabajo”. Maldades bien tiradas contra el emérito en los cuplés, comparándolo con el disparo de Alec Baldwin a una trabajadora en un rodaje y al ligue de un compañero de trabajo con una rubia. Tierra, libertad y Carnaval, mucho Carnaval.

El veredicto de Diario del Carnaval

Buena

La previa

El coro 'Tierra y libertad'

Miguel Ángel García Argüez el Chapa afronta en este Concurso Oficial de Agrupaciones Carnavalescas de 2022 la autoría en solitario tras separarse de Antonio Procopio, que tendrá un proyecto propio junto a Salvador Longobardo y Tino Tovar. A pesar de esta escisión tras 'Gloria bendita', gran parte del grupo se mantiene junto a Chapa, además de los pesos pesados de esta agrupación a nivel organizativo, como son los hermanos Francisco José y Juan Oliveros. 

Así, y a pesar de que García Argüez seguirá en la modalidad de comparsas al hacerse cargo del antiguo grupo de Juan Carlos Aragón con 'Los renacidos', mantendrá su apuesta por el tango, en la que lleva inmerso desde que se estrenó en el año 2018 con 'Tiempos modernos'. En aquella ocasión, contó con la música de Tino Tovar, aunque ya con 'Gran reserva', en 2019, Chapa se hizo cargo de la música. 

Ante las bajas de dos pesos pesados como los coros de Julio Pardo y Nandi Migueles, este coro es uno de los que parte con opciones para hacerse un hueco por primera vez en la Gran Final tras no haber bajado del escalón de las semifinales desde su nacimiento.