Boxeo

Una lesión aparta al gaditano Camacho del camino a los Juegos Olímpicos de Tokio

  • Baraja dar el salto a profesional o desarrollar un proyecto para acercar su deporte a las barriadas portuenses

Alejandro Camacho, entrenando en El Puerto hace unos años.

Alejandro Camacho, entrenando en El Puerto hace unos años. / Fernández Hortelano

Alejandro Camacho es un boxeador de 27 años de El Puerto. En su palmarés suma cinco títulos de campeón de España amateur y numerosas medallas internacionales, premios que ha ido sumando durante los 104 combates disputados durante su carrera. Desde que en 2016 fuera la gran revelación del año al ganar la medalla de oro en la Odivelas Box Cup, torneo internacional que se celebra anualmente en Portugal, la selección española siempre ha contado con él y se ha convertido en una pieza importante de la misma.

Camacho tenía la ilusión de participar en los Juegos Olímpicos de Tokio durante este 2020, pero debido a la lesión de un nervio que conecta el cuello con el hombro el púgil portuense deberá esperar para cumplir su sueño. El pinzamiento que sufre desde hace cuatro meses le impedirá presentarse a los torneos clasificatorios en busca del pasaporte a la cita japonesa, objetivo que no logró para Río de Janeiro en 2016. No obstante, Alejandro confía en que unos meses más de reposo serán suficientes para sobreponerse de la dolencia y volver a los rings a partir de junio.

El portuense, que ahora se dedica a impartir clases en una conocida cadena de gimnasios, no ha dejado de recibir propuestas para seguir con su futuro como deportista de élite. Durante este tiempo va a decidir si cuando vuelva al cuadrilátero lo hará como boxeador profesional, dado que ha recibido ofertas tanto de EEUU como de España para conseguir la licencia.

Actualmente, Camacho se encuentra "feliz y tranquilo, disfrutando de estar cerca de casa". Pese a la lesión, el boxeador puede seguir entrenando sin dolor y eso le permite continuar con su trabajo de monitor de gimnasio y mantener el buen estado de forma. Después de haber estado siete años lejos de su familia, Alejandro valora mucho poder estar en casa y su intención es "disfrutar del momento y vivir las cosas con calma".

El púgil no quiere precipitarse a la hora de tomar una decisión. Aunque le atrae mucho la idea de volver al ring con la licencia de profesional, ahora está viviendo un momento dulce. Su situación, además de mantener el trabajo actual, le permitiría llevar a cabo el proyecto con el que lleva soñando los últimos años. El propósito de inclusión social mediante el que quiere acercar el boxeo y sus valores deportivos a las barriadas portuenses podría llevarse a cabo una vez el Ayuntamiento termine de preparar los presupuestos para este 2020. Camacho asegura que "es un gran honor poder estar trabajando de lo mío, cerca de casa, y poder compaginarlo con este proyecto que puede ayudar a los chavales y que además tiene que ver con el boxeo, que es lo que más me gusta".

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