Desplazamiento decepcionante el realizado por el Cádiz FS a Melilla en lo que supuso el arranque de la segunda vuelta en la Segunda División femenina de fútbol sala. El Torreblanca local terminó imponiéndose por 6-2 después de que las gaditanas equilibraran un marcador que se convirtió en muy adverso en los primeros minutos.

Las visitantes, con sus filas bastante mermadas por las bajas, saltaron a la pista con muchas precauciones. Esto no sirvió para impedir que las norteafricanas marcaran dos tantos muy madrugadores. El inmediato tiempo muerto pedido por los técnicos gaditanos propició un cambio de dinámica, defendiendo más fuerte y llegando a la portería contraria. Esta variación propició la llegada del gol de Mery antes del descanso y luego la del de Bea al recibir una asistencia de Segura.

Todo apuntaba a que la cosa ya marchaba sobre ruedas, pero dos minutos más tarde se volvió a poner por delante el Torreblanca en una acción aislada. Este jarro de agua fría provocó una desconexión total, costando las precipitaciones cuatro tantos en contra en cinco minutos.