Ensayo en el Olimpo gaditano

La selección española de fútbol, la olímpica, disputa esta noche el último ensayo antes volar al Reino Unido en busca de la medalla con la que sueña todo deportista que acude a unos Juegos, y si de oro mucho mejor. El escenario elegido para el duelo amistoso contra México es el Nuevo Estadio Carranza, que así se llama ahora el moderno coliseo del balompié gaditano una vez concluida las obras de la nueva Tribuna, esa que hoy podrán ocupar los aficionados por primera vez para ver un partido, aunque éste no tenga carácter oficial.

La grada recién terminada es el principal aliciente de un duelo que, aun siendo de elite, no se puede decir que sea de máximo nivel. El estreno del frontal de referencia del estadio, unido a la conmemoración del Bicentenario de la Constitución de 1812, hubieran merecido un encuentro de mayor enjundia. En su día se barajó que Carranza albergara un encuentro de la selección absoluta, la campeona mundial y europea -se llegó a especular con el nombre de Francia como posible rival-, aunque esa aspiración ambiciosa se acabó esfumando hasta quedarse en otra de menor calado.

Aunque hoy no pisarán el césped Casillas, Ramos, Piqué, Xavi, Busquets, Xabi Alonso, Iniesta, Silva…, el consuelo es que sí estarán sí estarán los herederos de La Roja, los que hace un año conquistaron de manera brillante el Europeo sub'21.

El combinado entrenado por Luis Milla parte, junto con Brasil, como firme candidato a colgarse el oro en la cita olímpica pese a perder el pasado viernes en el compromiso de preparación contra Senegal (0-2) disputado en la localidad grancanaria de Maspalomas. La derrota resultó útil, fue un toque de atención para un equipo todavía falto de rodaje en el que no estaban Jordi Alba, Javi Martínez y Juan Mata. Los recientes campeones de Europa con los mayores se unieron al grupo al día siguiente y se espera que hoy participen en el choque contra los mexicanos. La presencia de estos tres baluartes debe dar empaque a un conjunto joven que aspira a lo máximo en los Juegos Olímpicos.

El partido contra México medirá la temperatura de La Rojita a ocho días de su estreno en la competición en Glasgow, donde tendrá enfrente a la siempre correosa selección de Japón. Los nipones se caracterizan por un elevado despliegue físico que obligará a los españoles a llegar en un adecuado estado de forma para afrontar con garantías ese primer duelo que siempre es importante. Y la importancia del encuentro de esta noche es que después de éste ya no quedan más ensayos.

La selección española está concentrada en Jerez desde el pasado sábado. Su presencia no ha pasado inadvertida entre los aficionados jerezanos, que no dudaron en pedir autógrafos y fotografiarse con los jóvenes cachorros de la cantera nacional por las calles del centro de la ciudad. No debe extrañar esa expectación por el tirón mediático de muchos de los jugadores olímpicos. Además de los tres campeones con los adultos, están De Gea, Ander Herrera, Muniaín, Tello, Adrián…

Milla podrá disponer esta noche de los tres últimos en incorporarse. Así, el posible once titular estaría formado por De Gea en la portería, con Montoya, Javi Martínez, Domínguez y Jordi Alba en la línea defensiva; Oriol Romeu llevará la batuta junto con Koke y Ander Herrera, con Muniaín, Mata y Adrián como estiletes en ataque. El once podría sufrir alguna variación si Muniaín continúa con molestias físicas, en cuyo el malagueño Isco sería su sustituto. El jugador del Athletic de Bilbao trabajó ayer a menor ritmo y es posible que Milla lo deje en el banquillo para no correr riesgos innecesarios.

La selección se entrenó ayer en el estadio Carranza delante de 5.000 aficionados que ocuparon la nueva Tribuna del estadio. La novedad fue la llegada de Julen Lopetegui, que se unió al cuerpo técnico tras el éxito cosechado con la selección sub'19, campeona de Europa de la categoría.