El Cádiz B no pudo pasar del empate a cero ante un Cabecense que demostró más virtudes que las de un equipo que pelea por no descender. La falta de pegada de los amarillos acabó condenándoles a ceder dos puntos vitales en su lucha por el liderato.

Muy al contrario de lo que indicaba la clasificación, el conjunto sevillano saltó al rectángulo de juego dispuesto a llevar la iniciativa desde el primer momento. Al filial le costaba entrar en el partido. Los cambios obligados que tuvo que hacer Juanma Pavón en el once por las bajas de los sancionados Sergio y Braganza, del lesionado Cubero y de Saturday, convocado por Álvaro Cervera, condicionaron sobre todo en el tramo inicial del choque a los amarillos.

No obstante, a medida que transcurrían los minutos el cuadro local se iba soltando y empezaba a tomar el mando. El titular de Las Cabezas de San Juan, que había protagonizado varias acciones peligrosas por la derecha, se replegaba y optaba por alejar el balón al patadón en vez de sacarlo tocando como antes.

El primer acercamiento de los gaditanos digno de mención se produjo en el 23’, cuando un pase en profundidad a Franco lo prolongó éste con un centro que no acertó a conectar a puerta Javi Pérez. Un aviso como la contra que condujo y finalizó muy desviado Hinojosa cuando la contienda se aproximaba a la media hora. Un tímido cabezazo de Javi Salas que detuvo sin problemas Cristian Arco había sido lo único verdaderamente potable en ataque del Cabecense hasta ese instante.

Así y todo, los sevillanos estuvieron más cerca de adelantarse a punto de llegarse al descanso, cuando un pase al interior del área permitió a Pepelu rematar ante la salida de Arco. La pelota se marchó fuera, pegada al palo derecho de la portería, para alivio de la grada.

Como en el arranque del choque, la segunda mitad empezó con los visitantes apretando. Un tiro de Schuster muy alto y un robo que Ilias no supo culminar, con disparo de Guerra a las nubes tras regalo de Seth en el posterior córner, sirvieron como aviso a navegantes en cuanto a las intenciones de los sevillanos. Con todos atrás y Seth como única referencia arriba, el Cádiz B se dispuso a sufrir porque, aunque el triunfo era el objetivo, el empate también corría peligro.

El equilibrio de fuerzas y la tensión en alguna que otra acción por lo incierto del resultado marcaron el grueso del segundo periodo, en el que los pupilos de Pavón fueron incapaces de hacerse con el control de la situación y sólo se acercaban en ocasiones aisladas. Como cuando en el 68’ Javi Pérez pasa atrás, dentro de área, y Hinojosa lanza fuerte pero desviado.

El técnico cadista decidió quemar las naves en la recta final al refrescar el ataque metiendo a Peter en lugar de Javi Pérez. El Cabecense hacía rato que no se acercaba al área rival pero era evidente que no renunciaba a nada.

Ahora sí, el filial se lanzaba a por la victoria, aunque con más corazón que claridad de ideas. Un centro de Iván Robles desde la derecha en el 84’ lo cabeceó Chapela picado y fácil para el portero. En el 86’, Moisés bota una falta desde 30 metros, el cuero toca en la barrera y, ya con el portero batido, se estrella en el larguero. Y en la prolongación, doble oportunidad de Peter, primero de cabeza y luego en un mano a mano en el que no anduvo rápido.

Sin tiempo para más, empate justo a tenor de los méritos de uno y otro, y dos puntos que vuelan de El Rosal ante un contrincante a priori inferior, aunque como ya había advertido Pavón en esta Tercera División no existe enemigo pequeño.