El Cádiz B ha conseguido evitar el problema que hubiera significado pelear por evitar el descenso a Tercera. El punto ante el Recreativo de Huelva (2-2) le deja en el grupo intermedio, en el que tendrá opciones de luchar el ascenso a la nueva categoría. Al Decano le queda sufrir.

Hay que hablar de una primera mitad muy movida y con una intensidad bestial. El Recre salió a por todas, encerrando a su enemigo y mostrando unas cartas intimidadoras hasta conseguir agobiar a su enemigo. Un Cádiz B que se multiplicaba para defenderse porque los onubenses estaban muy enchufados desde el arranque. Esto se tradujo en un lanzamiento de Morcillo a la izquierda de Flere (3') y en un remate de chilena de Quiles que se escapó muy desviado.

El duelo entró en una fase de mayor equilibrio porque los de Cifuentes dieron un paso al frente y así se llevó a cabo una recuperación de Carrasco ante José Antonio González y el pase a Sergi lo tapona un zaguero cuando el murciano encaraba a Nauzet. Definitivamente el Cádiz B había aparecido en el derbi regional para quedarse porque encontraba el camino para sufrir menos y llegar más.

Después de un aviso de Chapela con remate forzado junto a un poste y de la mejor ocasión del Recre en la primera parte, un mano a mano de Luis Madrigal con Flere que sacó el portero cadista, llegó el 1-0. Morcillo se equivoca de manera brutal y Nieto le roba la cartera para servir tres cuartos de gol a Chapela, que empujó el balón a portería vacía. Menuda bronca de Nauzet a Morcillo, algo más que palabras. Precisamente el portero del Recre fue protagonista de la última acción reseñable antes del descanso al salir a los pies de Chapela para evitar el segundo gol.

A vuelta de vestuarios, Antonio Calle retiró al señalado Morcillo y varió el dibujo. Hubo un guión similar al del inicio del encuentro porque el empuje onubense fue notable. Momo cometió un error en el despeje que casi manda al fondo de la red Sillero. Y en el posterior saque de esquina es Diego Jiménez el que cabecea alto con todo a favor. Se olía el empate, que cayó finalmente en el 61'. Gran pase de Sillero a Quiles y éste mete la punta de la bota para mandar el balón por el poste que tapaba Flere, en lo que se puede entender como su único error en el encuentro.

El duelo entró en una fase fea para los locales, aturdidos por el golpe, aunque por fortuna duró el tiempo justo de que Mady Diarra accediera al campo y firmara una jugada sensacional por la izquierda cuyo centro lo alcanzó Carrasco para hacer el 2-1. Doble valor de un gol por la ventaja y por dar una patada a la reacción de los visitantes.

Locura de cambios en ambos banquillos y muchos nervios. Esto provocaba que el partido se rompía en la segunda parte con llegadas directas al no haber tiempo para elaborar. Los amarillos achicaban agua al tiempo que los blanquiazules cargaban el ataque con efectivos pero con menos frescura. Boselli pudo sentenciar en una acción muy suya en la que se fue abriendo hasta soltar un zurdazo que repelió un Luis Madrigal que quedó lesionado.

A falta de once minutos para el final, Yaimil puso a prueba los corazones de cadistas y recreativistas al anotar el empate a dos. El venezolano fusiló a Flere tras recibir un balón que en dos saltos Quiles le había ganado a un endeble Duarte. Quedaba poco pero se podía hacer un mundo. Con Nauzet casi como central, Calle mandó a toda la artillería al ataque, si bien se jugó poco porque Boselli y el recuperado Javi Navarro detuvieron el partido en un córner durante casi tres minutos. Ahí acabó el duelo, comenzó el sueño del Cádiz B por poder alcanzar la nueva categoría y empezó la pesadilla del Recre para no bajar a Tercera.