Sultanas de coco, coquitos, cocadas, besos de coco... El nombre real no está del todo claro, aunque lo sí es 100% seguro es que este postre está exquisito. Además, para realizarlo tan solo necesitaremos 3 ingredientes: coco rayado, azúcar y huevos. Aunque se le puede añadir un cuarto, como por ejemplo rayadura de naranja, de limón o cacao, para darle un toque distinto de sabor.

Los pasos a seguir para realizar los coquitos son muy fáciles si seguimos la receta de Golosilandia. Tan solo habría que mezclar todos los ingredientes y hornear después de darle esa forma tan característica. 

Ingredientes que necesitas para preparar los 'coquitos'

Para realizar esta receta, los ingredientes que se necesitan son:

• 200 gramos de coco rayado (2 tazas)
• 200 gramos de azúcar (1 taza)
• 3 huevos.

Los pasos que hay que seguir para hacer las sultanas de coco son muy sencillos. Primero cogemos un bol que sea amplío y en él echamos los 200 gramos de coco rayado y los 200 de gramos de azúcar. Los mezclamos bien para así conseguir que la textura final de los coquitos sea homogénea, por lo que estaremos haciéndolo unos 30 segundos.

Luego añadimos los 3 huevos y volvemos a mezclar hasta que formemos una pasta con una textura uniforme. Colocamos un papel film encima, tocando directamente la superficie de la masa para que se mantenga toda la humedad dentro, y llevamos a la nevera el bol, donde deberá estar unos 15 minutos. En este punto podemos poner a precalentar el horno a 180 grados.

Finalizado el cuarto de hora de espera, retiramos el film que habíamos colocado encima y pasamos la mezcla a una manga pastelera, aunque también podrían hacerse las formas con la mano. En Golosolandia utilizan una boquilla rizada grande, y así consiguen darle a las sultanas de coco esa textura tan característica. Si cuesta un poco pasar la pasta de la manga a la bandeja del horno es porque se ha quedado demasiado fría de la nevera, por lo que simplemente habría que esperar un par de minutos y volver a intentarlo.

Damos forma a las sultanas de coco encima del papel del horno, que tendremos colocado encima de la bandeja, y las horneamos a 180 grados, con calor arriba y abajo y sin ventilador, durante 12 minutos, que será el tiempo necesario para que se doren por los bordes, dándole un textura crujiente por fuera, pero estando blanditos por dentro. Después tan solo quedaría disfrutar de estos exquisitos coquitos, típicos de la Navidad en algunos hogares, pero que apetecen en cualquier época.