Recomendaciones para cuando acabe el apocalipsis. Isla de Pascua. FSM

11 de abril 2020 - 09:03

Hay lugares mágicos en el mundo donde se siente algo especial. O al menos yo lo he sentido. Los celtas pensaban que por debajo de la capa terrestre corre una corriente magnética que aflora en algunos lugares concretos por lo que esos sitios tienen cualidades mágicas. Si eso fuera así yo solo lo he sentido en el Cañón del Colorado, el cráter del Ngorongoro y la Isla de Pascua. Me atrevería a decir, por ser algo más prosaico, que lo de la Isla de Pascua está motivado por ser una fijación infantil: en la biblioteca de mi padre encontré una vez un libro de Thor Heyerdal, el aventurero noruego que hizo la gesta de la Kon-Tiki. Heyerdal quiso demostrar su teoría de cómo se levantaron los moais de Pascua (esas esculturas gigantes que, por si fuera poco, llevaban un tocado encima de la cabeza). El libro donde lo cuenta, "Aku aku" es simplemente delicioso. Su llegada a Pascua, su relación con los nativos, sus experimentos hasta encontrar una fórmula aceptable para señalar el método empleado para poner en pie estas enormes estatuas que pesan toneladas: al llegar al sitio, abrían un hueco en el suelo a los pies de la estatua que había sido transportada tumbada, iban levantándola poco a poco a base de meterle pequeñas piedras por debajo,hasta que el moai caía al dentro del agujero practicado. Luego hizo Kevin Reynolds la película "Rapa nui" donde explica el colapso al que llegó la isla tras los enfrentamientos entre las dos razas: los orejas largas y los orejas cortas. El caso es que Pascua es el lugar habitado que tiene más lejos otro lugar habitado. Está a cerca de 4.000 kilómetros del lugar poblado más cercano, motivo por el cual los rapa nui pensaban que eran los únicos habitantes de la tierra. Luego se demostró que eran polinesios que habían llegado en las grandes embarcaciones con las que poblaron las islas del Pacífico. En contra de lo que se pudiera pensar, solo hay una playa, Anakena. Eso sí, el mar es limpio y de color turquesa. Hay lugares maravillosos como Tongariki, Ranu Roraku, Hanga Roa. Los moais que están en pie fueron levantados hace años porque diferentes desastres naturales los tiraron al suelo. Es curioso que estas estatuas miraban siempre hacia el interior de la isla. Se come un pescado excelente. Por motivos comprensible el gobierno de Chile tiene una limitación de personas que pueden visitar la isla, cuyos recursos naturales son escasos como es fácil de entender.

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