Dioni, por si alguien no lo sabe todavía a estas alturas de la película, con el The End a punto a aparecer en la pantalla, recordó ayer en qué posición se encuentra más cómodo: "Arriba me encuentro un poco solo, la verdad, y a mí me gusta venir a recibir, tocar el balón y apoyar la jugada. Puedo jugar de delantero, pero prefiero hacerlo de mediapunta". Ahí queda.

"Llevamos una racha mala de goles, pero ahora es el momento más oportuno para acabar con ella porque si ganamos este domingo por dos a cero ascenderemos", recordaba el malagueño con la portería del Lugo entre ceja y ceja.

"Estaba un poco mal psicológicamente porque no estaba jugando, pero ahora tengo la oportunidad de hacer en un partido todo lo que no he podido hacer en la segunda vuelta", decía en la sala de prensa de El Rosal.

Dioni tiene el cuchillo entre los dientes. "Desde que acabó la ida estamos pensando en la vuelta", aseguraba. "En la primera parte del partido en Lugo el campo estaba muy mal y todos sabemos que no jugamos bien, pero ellos tampoco hicieron nada del otro mundo como para llevarse un tres a uno. Luego, en la segunda parte, hicimos algo más y el gol de Óscar Pérez nos da alas. Estamos convencidos de que se puede subir, estamos capacitados para firmar el objetivo". El malagueño abogaba por "mirar el espejo del Lucena". "Allí nos metió tres goles y aquí, en el estadio Carranza, le metimos cuatro nosotros", explicaba.

"El árbitro que haga su trabajo, sin dar nada a ninguno de los dos equipos, y nosotros haremos el nuestro", concluía el delantero del equipo amarillo, que se siente mucho más cómodo jugando en la mediapunta.