Jorge Mágico González no faltó a una cita que empieza a ser habitual cada vez que vuelve por su segunda casa, ya que ayer visitó la redacción de Diario de Cádiz. En la sede del periódico, entregó una camiseta conmemorativa al director, David Fernández, repasó algunos ejemplares de su época como jugador y posó junto a un amplio grupo de trabajadores.

Tan inolvidables como sus goles, la leyenda del cadismo recordaba su anterior visita al rotativo en la última visita realizada a la capital gaditana en el año 2003. Entonces y ahora, el salvadoreño tuvo un hueco para los profesionales de esta casa que recuerdan sus 'diabluras' con la elástica amarilla. Jorge, acompañado por Manuel Vizcaíno y Martín García Marichal, estuvo amable, cercano, atento a muchas peticiones de foto y hasta cariñoso a pesar de su aparente cansancio después de un largo viaje. Supo estar y fue sorprendentemente puntual, lo que es de agradecer en su forma única de entender la vida.

Durante su estancia en esta redacción, Mágico contempló los cuadros históricos del Cádiz en la conquista de su primer Trofeo Carranza, que lucen en la zona de la sección de deportes, y se paró ante el que aparece parte de la plantilla de la temporada 1981-82, con gente inolvidable y tan importante para él como Pepe Mejías y Mané. Ver esa imagen le tocó en lo más hondo porque se detuvo a tocar el cuadro con bastante afecto y mostró un talante casi como de oración, entendiendo una vez más la religión que profesa el cadismo.

También hubo lugar a que viera la fotografía que en 2003 se hizo con la plantilla de profesionales de Diario de Cádiz, viendo él en primera persona cómo han pasado los años, y preguntando por un periodista ya jubilado, Antonio Díaz, al que le une mucho de la etapa de ambos junto al Cádiz, cada uno desde su faceta, y que dijo públicamente que desea ver durante su actual estancia en la Tacita.

Otro momento cargado de nostalgia le llegó en la hemeroteca del periódico, cuando le pusieron por delante portadas y páginas de aquellos maravillosos años de amarillo y azul; el golazo al Racing de Santander y sus tardes de gloria a lo Curro Romero. El responsable de la hemeroteca, Diego Joly, preparó varios tomos de los momentos más señalados del ex futbolista en el conjunto cadista. Jorge revivió en páginas en blanco y negro la locura que despertaba como profesional y la que de nuevo ayer, 15 años después, provocó entre las paredes de este rotativo.

Una foto de familia en el acceso de la redacción puso el punto y final a la breve pero intensa estancia de uno de los grandes del cadismo en el corazón de Diario de Cádiz.