La visita del Extremadura Unión Deportiva al estadio Carranza para medirse al Cádiz CF (tercer compromiso de la conocida ahora como LaLiga SmartBank) produce dos reacciones inmediatas.

Una, el equipo que en la penúltima jornada de la pasada campaña sorprendió a un Cádiz CF que se las prometía felices en casa hasta que la victoria de los azulgranas apartó a los amarillos de manera casi definitiva y traumática de la batalla por la fase de ascenso.

Dos, el regreso de Kike Márquez a la que fue su casa durante un tramo de la última etapa de la entidad en el pozo de la Segunda División B. El sanluqueño ha madurado como futbolista hasta el extremo de convertirse en uno de los soportes fundamentales de su equipo. Desempeñó un rol relevante en el ascenso del Extremadura y en su primer curso en la categoría de plata lució el brazalete de capitán.

Cadista confeso, Kike Márquez no ocultaba esta semana que la comparecencia en el Carranza supone para él un partido especial por los recuerdos que afloran y por su condición de seguidor amarillo.

Pero los sentimientos quedan a un lado cuando empieza a rodar el esférico. Profesionalidad ante todo. El atacante hablaba hace unos días de la necesidad de puntos que tiene su equipo después de un dubitativo comienzo de temporada. Quiere repetir victoria ante un Cádiz CF que va lanzado.

Y recordaba su anterior paso por el santuario cadista todavía reciente, cuando recibió pitos procedentes de la grada en el momento de ser sustituido en la segunda mitad cuando su equipo ya mandaba en el marcador. Siempre respetuoso con la afición cadista, no entiende los silbidos cuando estaba defendiendo los intereses de su actual escuadra. Cosas del fútbol.

Los de Almendralejo vienen de nuevo a por el triunfo con una columna vertebral muy definida, en la que Kike Márquez ostenta galones (ha disputado los 180 minutos iniciales de la Liga) junto al portero Casto, los defensas Bastos y Ale Díez y el medio Zarfino, un pulmón en una posición clave. A ellos se unen recién llegados como el medio David Rocha y extremo izquierdo Nono, además de Óscar Pinchi, delantero que en la última campaña sobresalió en el filial del Atlético de Madrid.