Las jornadas transcurren y cada vez es más evidente las posiciones en las que el cadismo hace quinielas para adivinar quiénes serán los elegidos. Si no hay bajas que digan lo contrario, esta cuestión aparece en el extremo derecho y la mediapunta o pieza más ofensiva del trivote.

En el último encuentro liguero, ante el Valladolid, Álvaro Cervera se decantó por Salvi en lugar de Nico Hidalgo para la banda derecha. En este caso la decisión vino precedida por los males que afectaron ese día al ex futbolista del Granada, que fue la causa por la que dejó su sitio en el once al sanluqueño. Con los dos jugadores en condiciones, el técnico es el que debe decidir, para lo que toma como referencia las condiciones de uno y otro, las características del rival y sus propias sensaciones, que son a la postre las que más pueden pesar en la decisión.

La otra demarcación en la que saltan dudas más que razonables es la mediapunta o la pieza más ofensiva del trivote si ese fuera el dibujo para el centro del campo. Hay varios candidatos, aunque dos tienen más fuerza que otros. Se trata de Eddy Silvestre y Rubén Cruz. Salvo sorpresa, uno de los dos será elegido y aunque a la masa social sigue sin convencer el ex del Córdoba -muy cuestionado por la grada-, la fe ciega del club en sus prestaciones le otorga cierta ventaja a la hora de pelear el puesto.