Cádiz CF

El Cádiz CF se aferra a su fortaleza en casa para dar un paso al frente

Brian Ocampo con el balón en el Cádiz-Mallorca.

Brian Ocampo con el balón en el Cádiz-Mallorca. / Miguel Gómez

El Cádiz CF afronta una auténtica final contra el Girona el próximo viernes 10 de febrero en el estadio Nuevo Mirandilla. El retraso que lleva en los deberes el conjunto amarillo eleva la trascendencia del partido que abrirá el telón de la 21ª jornada de Liga.

Pese a que la segunda vuelta no ha hecho más que empezar y aún queda mucha tela que cortar, el Cádiz CF se complica la vida por sus fallos propios y los aciertos de sus rivales directos. Está en riesgo de verse descolgado en la pelea por la permanencia si sufre un frenazo en la suma de puntos y sus adversarios dan un paso adelante. El Valladolid, por ejemplo, aprieta con dos victorias seguidas.

La situación es delicada, pero en el vestuario cadista confían en dar un paso al frente sin dilación. El cuerpo técnico y los jugadores trabajan a destajo con la intención de remontar el vuelo lo antes posible. Están concienciados de la importancia del partido contra el Girona y se aferran al calor del hogar para quedarse con el botín.

Las tres derrotas consecutivas como anfitrión al comienzo de curso encendieron las alarmas: 0-1 ante la Real Sociedad, 0-4 contra el Athletic de Bilbao y 0-4 frente al Barcelona. No sólo fue perder, casi más gran fueron las malas sensaciones con el añadido de ningún gol a favor y nada menos que nueve en contra.

Pero el Cádiz CF cortó la sangría y se hizo fuerte en casa arropado por su gente. Lleva cinco meses y siete partidos sin perder en el antiguo Carranza. Eso sí, le falta dar un paso más para que esa fortaleza se traduzcan en más triunfos que empates.

En esos últimos siete encuentros sin conocer la derrota como local, el cuadro gaditano cosechó cinco igualadas (ante el Villarreal, Espanyol, Betis, Almería y Elche) y un par de victorias (sobre el Atlético de Madrid y el Mallorca. No logró vencer a rivales directos como Espanyol, Almería y Elche.

El balance de los amarillos en su terreno no termina ser el que necesita para dar impulso y salir de la zona de descenso. Desde que dejó de perder en el Nuevo Mirandilla, el Cádiz CF sumó 11 de 21 puntos, aunque mejoró en la balanza goleadora: nueve a favor y seis en contra.

Después de vencer al Mallorca con el triunfo más holgado de la temporada (2-0) en la última cita en territorio gaditano, el equipo de Sergio González quiere mantener esa buena dinámica con otros tres puntos ante el Girona que se antojan fundamentales en este momento del campeonato.

El lastre del pésimo arranque de campaña sitúa al Cádiz CF como el cuarto peor conjunto local de la Liga, pero en los últimos meses ha ido a más. El viernes tiene la oportunidad de demostrar que es un equipo poderoso en su estadio. No vale otro resultado que no suponga la victoria.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios