Mantener un negocio en el casco antiguo de Cádiz durante 25 años no es cuestión baladí con la que ha caído y sigue cayendo. El proyecto que dos chavales emprendieron en 1994 en la calle San Pedro llega a su esplendor vendiendo ropa de calle, casual, urbana. “Vivimos nuestro mejor momento”, apunta Jose Otero, el propietario de Absoluters Street Wear, en el número 10 de la calle Rosario. A su lado, Susana Fuentes, conocida como 'La Sueca. Ambos fundaron hace un cuarto de siglo la tienda primitiva en la calle San Pedro, llamada Rad World. “Abrimos después de un tiempo vendiendo ropa a domicilio, ropa para jóvenes que no existía en Cádiz, marcas internacionales que no habían llegado aquí y que nosotros las trajimos”, señala Otero. Fue un éxito a pesar de sus escasas dimensiones.

Al año de abrir ya cambió el nombre a Absolut. “Reintroducimos el pantalón pitillo y la camisa de cuadros”, presume. Luego se instalaron a la esquina de San Pedro y Valverde. “Ahí empezamos a vender ya zapatillas. Y nos fue tan bien que la ropa se quedó allí y aquí en Rosario abrimos con zapatillas. Ambas tiendas convivieron hasta la dura crisis. Entonces nos replegamos y unificamos las dos”, explica. Y ha sido precisamente en este año del 25 aniversario cuando el establecimiento ha cambiado a Absoluters “porque esto es como un club de encuentro de los chavales y chavalas, a los que llamamos absoluters”. Una apuesta fuerte. La tienda ha sido reformada y enfrente han abierto Absoluters Kids, en el local que antes usaban como almacén. “Hay clientes que son padres y abuelos. Ahora la clientela va desde recién nacidos hasta personas con 60 años”, señala.

Comenzaron vendiendo a domicilio ropa para jóvenes que no existía enCádiz

Dice Jose Otero que “hemos pasado de todo en estos 25 años y ahora, este tipo de moda está a reventar en todo el mundo”. De lo más atrevido a lo más básico. “Marcas en exclusiva, las mejores. Las marcas, cuando aterrizan nos buscan. Podemos decir que somos un referente en el sector en España”, destaca orgulloso. Y todo hecho con “mucho cariño, ilusión y orgullo” Aunque, claro está, nada hubiera sido posible “sin nuestros absoluters”.

Otero ve el futuro con optimismo. “El comercio está fuerte y hay un repunte tras la crisis. Antes, en verano, nos íbamos a hacer festivales y dejábamos aquí a empleados. Ahora es imposible con tanto turismo”, asegura. A por otros 25 años. De momento, para soplar las primeras 25 velas han organizado varias acciones festivas y promocionales. Como siempre, pensando en la clientela que vino, que viene y que vendrá. Por algo en el escaparate, serigrafiada, puede leerse la frase Join Us. Que traducido resulta “únete a nosotros”.