A partir de ahora, será necesario dar a los inmuebles de alta en el Catastro para conseguir la licencia de primera ocupación que da el Ayuntamiento. De esta forma, el promotor o constructor deberán previamente presentar ante el Catastro los datos del edificio para obtener este permiso, que es imprescindible para que las viviendas puedan conseguir el enganche de suministro eléctrico y de agua.

Se trata de una medida de control que intenta garantizar que todos los inmuebles estén registrados en el catastro y, por tanto, que estén localizados para que paguen el impuesto municipal sobre Bienes Inmuebles (IBI).

Una ley de del año 2006 (la de Haciendas Locales) establece la posibilidad de que los ayuntamientos exijan la acreditación de la declaración catastral de nueva construcción en los expedientes de licencia que autorizan la primera utilización de los inmuebles, según argumenta el equipo de gobierno municipal gaditano en la propuesta que fue aprobada ayer.