Están dando 'caló' con......los sombreros de paja

Es contradictorio traer a esta sección algo que precisamente ayuda a evitar la calor. Sin embargo es una cosa que está dando 'caló'. El sombrero de paja para hombres, sobre todo tipo mascota, tipo Bogart pero en tieso y sin el atractivo del dueño del Rick's Café de Casablanca, es el descubrimiento del verano. Lo que antes era complemento obligado de las féminas, o de los hombres del campo, incluido Chanquete cogiendo papas en el huerto anexo a la 'Dorada', es ahora una pieza casi indispensable en el bando masculino. Principalmente en los más jóvenes, que ya encuentran estos sombreros en sus tiendas de moda. Zara, H&M, Springfield, Pull& Bear... Aunque (por experiencia) también hacen el avío los de las tiendas de chinos. Los hay por 3 euros, oigan. ¿Quién no se protege de los rayos del sol y además va a la moda por tres pavos? Que se lo digan al cantante Toni Zenet, muy devoto de la mascota de paja (por cierto, viene a actuar a Cádiz este agosto).

También puede usted optar por la versión pija: el famoso Panamá. Es un sombrero originario y fabricado en Ecuador, y su nombre se explica por la relevancia que alcanzó durante la construcción del Canal de Panamá entre los trabajadores (Viva la Wikipedia). Se aconseja no utilizar, como Chanquete, para coger apios o tagarninas. Es una prenda 'chic' más bien para pedir un martini o una piña colada. Algunos de estos Panamá pasan de los 1.000 eurazos. Por ese precio, a mí el sombrero (no sé a ustedes) además de quitarme el sol me tendría que vigilar la ropa cuando me fuera al agua, sacudir los pies de arena al irme y cargar con la sombrilla y las sillas.

Hoy están de moda estos sombreros pajizos, hace unos años no. Antes, en Cádiz, ese tipo de gorro sólo se veía en comparsas de oficios. 'Caña y mimbre', por ejemplo, de 1988. Y no hace mucho los sacó del baúl de los recuerdos la chirigota 'Los enteraos'. Absténganse de usar para la playa los sombreros que hoy día llevan la comparsas: con tres pisos, portero automático y ropa tendía. No son nada cómodos en verano.